Según explicó ayer el director de Gestión del Servet, Miguel Carroquino, el centro está a la espera de recibir un pedido de 14.000 sábanas, 6.000 pijamas y 6.000 toallas más, que se sumarán a la ropa que ya tiene el centro. De esta forma, el hospital quiere garantizar que a todos los pacientes "se les pueda cambiar la ropa tantas veces como sea necesario", uno de los objetivos que se ha marcado la dirección. Asimismo, Carroquino indicó que es posible "poner en circulación" toda esta cantidad de ropa, porque ahora el hospital cuenta con una lavandería capaz de asumir ese volumen.