Estar en el hospital es sinónimo de algo negativo y es por eso por lo que muchas personas luchan cada día para que esto no ocurra y la estancia sea lo más agradable posible. Una intención que tiene más valor en el caso de los más pequeños que padecen algún tipo de problema de movilidad o que se encuentran en oncopediatría o neuropediatría, entre otras, a los que a veces la sonrisa no les acompaña.

Para conseguirla, la Asociación Cultural y Deportiva de los Bomberos de Zaragoza y la Fundación Sesé, que además cuenta con la colaboración de La Fuerza del Corazón, la Fundación Juegaterapia y Aspanoa (Asociación de Padres de Niños con Cáncer de Aragón), se han puesto manos a la obra en el hospital Materno Infantil de Zaragoza. Con un objetivo claro: darles una alegría a todos esos pequeños luchadores.

Los Bomberos se han adelantado este año a los Reyes Magos y han traído por cuenta propia una nueva sala de espera que está siendo decorada con la ayuda de los responsables del Salud. De esta manera, lo que se quiere conseguir es que se convierta en una habitación más cómoda, agradable y acogedora, tanto para los niños, como para las familias que los acompañan diariamente.

Los dibujos de los diseños hacen alusión a estos superhéroes de la lucha contra el fuego en la ciudad, que están aprovechando sus días de vacaciones para ir a ayudar en esta nueva iniciativa. Y lo hacen guiados por la creatividad de la decoradora Eva Monge.

Un camión de bomberos, un pequeño dálmata en una lancha (no es Marshall, de la Patrulla Canina) y los uniformes característicos de este cuerpo, son algunos de los dibujos que harán de esta sala una nueva habitación llena de alegría para que la espera no se haga tan larga. La asociación ha donado para ese proyecto 5.000 euros que habían recaudado con actividades que organizan todos los años, como la venta del calendario o la 10K.

Por otro lado, el próximo mes de octubre se inaugurará una nueva sala donde los más pequeños podrán ver películas y espectáculos sin necesidad de salir del hospital. El único requisito es tener ganas de disfrutar de una buena sesión de cine.

Las obras para conseguirla comenzaron durante la primera quincena del mes de julio y se están llevando a cabo en el antiguo salón de actos del edificio, ubicado en la cuarta planta. Con esta nueva construcción se espera que el nuevo espacio multidisciplinar mejore la estancia de los más pequeños del centro hospitalario.

La Fundación Juegaterapia, una de las colaboradoras, será la encargada de poner en marcha la nueva sala de cine con los fondos recaudados en diferentes actos solidarios y que forma parte de su iniciativa basada en el lema En el hospi estoy de cine.

Ambas iniciativas tienen un objetivo común, hacer que los pequeños se sientan como en casa y puedan disfrutar de un ambiente mucho más agradable y de servicios que les hagan olvidar donde están y por qué.

Cabe destacar la labor solidaria de ambas iniciativas, donde gracias a los donativos recibidos se va a conseguir hacer feliz a muchos niños, que lo agradecerán hasta el infinito y más allá.