Las altas temperaturas han dejado este verano (entre junio y septiembre) un balance de 94 atenciones en las urgencias hospitalarias debido a patologías relacionadas con el calor. De ellas, siete casos precisaron ingreso (4 hombres y 3 mujeres) y se notificó una defunción, según el plan de vigilancia del 2018.

Asimismo, Sanidad precisó que el incremento de los grados en los termómetros coincidió con «un aumento significativo» de las urgencias, sobre todo en la ciudad de Zaragoza, y de las atenciones extrahospitalarias notificadas por el 061. En Huesca, por ejemplo, se superó el umbral de casos esperados en los servicios de urgencias en 7 de las 15 semanas de vigilancia; en Teruel, solo en dos semanas; y en Zaragoza capital en 4 semanas.

Además, se observó como las temperaturas van aumentando cada año. Se denotó un aumento de más de 1 grado en las máximas y en las mínimas de casi toda temporada. En Teruel, en la primera quincena de septiembre, la mínima superó 2 grados la media de los últimos 15 años.