No hubo apenas diferencias a la hora de elegir el adjetivo en las asociaciones hosteleras después de conocer las nuevas restricciones propuestas por el Gobierno de Aragón. Entre «vergonzante» y «vergonzoso» anda la cosa, al tiempo que se insiste en pedir ayudas, indemnizaciones, se anima a acudir a los tribunales e incluso se considera que es mejor un cierre total que la obligación de cerrar los establecimientos a las 18.00 horas.

Luis Vaquer, presidente de la Confederación de Empresarios de Hostelería y Turismo de Aragón (CEHTA) y de Horeca Zaragoza, ve positivo que esté intentando mantener «un mínimo de actividad abierta», pero el señalamiento de la hostelería está provocando un cierre masivo por el miedo inoculado a los clientes cuando el origen masivo son otros entornos», dice el hostelero, que considera que tras nueve meses de pérdidas millonarias «y con una perspectiva de cierre de varios meses por delante, se hace necesario aplicar medidas de ayuda de compensación».

El sector turístico, en especial el de alojamiento, ha contraído su actividad el 80%, recuerdan en CEHTA. «Es sencillamente vergonzoso que desde las administraciones que dictan dichas limitaciones, los gobiernos autonómico y nacional, no hayan planteado indemnizaciones ni siquiera testimoniales», dice Vaquer, que anima desde su confederación «a todas las empresas y autónomos, si sigue el abandono y desprecio gubernamental, a iniciar procedimientos judiciales para que los tribunales puedan abordar en un futuro la gestión de esta crisis sanitaria y económica que ha destrozado miles de empresas sin indemnización alguna».

Desde la Asociación de Cafés y Bares de Zaragoza afirman que las restricciones «suponen la crónica de una lenta e implacable agonía de los negocios del sector hostelero, abocándoles indudablemente al cierre definitivo», afirmación que sostienen con datos: «Según nuestra última encuesta, para más de la mitad de nuestros establecimientos asociados (50,72%) su facturación cayó entre un 50% y un 75% en el ejercicio 2020 en comparación con el ejercicio 2019. Es más, el 21,74% de los mismos asegura que su facturación ha descendido más de un 75%. El 21,74% ubica sus pérdidas entre un 25% y un 50% y un 5,8% indica que su descenso es menor a un 25% respecto al año anterio"r.

Entre suspensiones y restricciones al desarrollo ordinario de los negocios se ha anulado la capacidad de negocio de la práctica totalidad de las empresas del sector, «a lo que hay que añadir una situación añadida de incertidumbre» por el horizonte incierto. «¿Hasta cuándo se va prolongar esta situación?», se preguntan.

En Cafés y Bares ven «evidente» que la situación actual llega «a causa de las reuniones y celebraciones en espacios privados durante las fiestas navideñas, espacios que por otro lado es imposible controlar». «Si la situación sanitaria lo requiere, sería más efectivo un cierre programado por un periodo temporal limitado, acompañado de compensaciones y garantías, que una apertura en las condiciones actuales», aseguran, además de considerar «imprescindible y urgente» adoptar medidas económicas de compensación análogas a las previstas por otras comunidades autónomas».

Las ayudas aprobadas hasta la fecha, «sometidas a dilatados procedimientos administrativos de trámite y concesión, en su mayoría pendientes de abono, son meramente simbólicas y no solucionan los problemas de liquidez» de las empresas. «En el año 2020 se aprobaron 11 millones de euros en ayudas directas, no 25 millones, frente a un presupuesto de 6.466 millones, lo que representa un 0,17% del total para un sector que aporta el 8% al PIB regional».

En la rueda de prensa del pasado 12 de enero la directora general de Turismo, Elena Allué, afirmó que Aragón es la tercera comunidad autónoma que más ayudas ha puesto en toda España en el año 2020, por detrás del País Vasco y de Asturias. «En lo que respecta a la hostelería, en materia de ayudas directas, no es así. Por ejemplo, Navarra aprobó un plan de 20 millones y Murcia de 20,3 millones. La Junta de Andalucía acaba de anunciar un plan de 19,7 millones en ayudas directas a la hostelería y se ha comprometido a tramitarlo con agilidad».

Por último, en Cafés y Bares califican de «vergonzante» que España sea «el único país de entre los principales europeos, que no ha aportado ayudas directas a la hostelería. Cuando la consejera habla de que otros países de nuestro entorno, como Alemania, Italia o Francia, han cerrado la hostelería totalmente, debería tener en cuenta que, en paralelo, se anunciaron medidas compensatorias al sector por dichos cierres de miles de millones de euros. Además, dicha medida demuestra el error en el planteamiento de las políticas implementadas. En el caso de Alemania, la hostelería lleva cerrada más de dos meses y, sin embargo, el índice de rebrotes es extremadamente alto».