Las 23 horas que duró la huelga de trenes convocada por CGT se desarrolló sin incidentes y con una afección "mínima" en el servicio. De los más de 9.000 trabajadores de la compañía, solo 65 secundaron los paros. Desde el sindicato no descartan nuevas movilizaciones.

En Aragón hasta 43 convoyes estaban en el punto de mira. La mayoría con destino Madrid o Barcelona aunque, como explicaron desde la compañía, la frecuencia del AVE suele ser de una hora por lo que los pasajeros tenían alternativas en caso de que su tren se viera afectado.

Desde Renfe aseguraron que no hubo problemas durante la jornada de huelga ya que los servicios mínimos para los trenes de alta velocidad, fijados por el Ministerio de Fomento, eran del 77%.

En cuanto a los Cercanías, a excepción de Cataluña, los mínimos establecidos oscilaban entre el 62,5% y el 75% en horas punta y el 43,5 y el 50% el resto del día. Los de larga distancia eran del 65 % y los de media del 7%.

En total, 269 trenes circularon en servicios mínimos y solo 81 se cancelaron de los más de 5.000 que recorren la red ferroviaria española.

Desde CGT Aragón, que aseguraron que la huelga fue secundad por el 70%, denunciaron que los servicios mínimos eran "abusivos". "Con el porcentaje de trenes que tienen que circular sí o sí el poder de la huelga está muy limitado", apuntaron. También señalaron que el ser un sindicato minoritario reduce el impacto de sus acciones.

Entre las principales reivindicaciones de CGT destaca "la privatización que el Gobierno de España quiere hacer del servicio", explicaron. Para el sindicato, se está construyendo una red de trenes de alta velocidad para ricos y se están "dejando morir" a los regionales. Además, exigen que se inicien ya las negociaciones del tercer convenio colectivo y que se renueve la plantilla actual. "La media de edad ronda los 50 años".