En respuesta a la urgencia sanitaria y económica, Ibercaja ha puesto en marcha distintas medidas para apoyar a sus clientes, particulares, autónomos, pymes y empresas, y atender en estas coordenadas sus necesidades financieras, recurrentes y provocadas por esta situación. Con este propósito, el banco aragonés anticipó al 25 de marzo (a partir de abril, el día 21) y al 3 de abril el abono de más de 367.000 pensiones y más de 61.000 prestaciones por desempleo, respectivamente, a los clientes con estos haberes domiciliados, por un importe total de 339 millones de euros en marzo y de 370 millones de euros en abril.

Hasta el 30 de abril, la entidad ha gestionado más de 6.200 solicitudes de moratoria hipotecaria por parte de los clientes, lo que supone una cartera de 547 millones de euros, equivalente al 2,8% del volumen total de los préstamos para adquisición de vivienda. Ibercaja extiende también esta moratoria al resto de préstamos a particulares, de los que se han recibido las primeras 100 solicitudes en tres días.

En cuanto a la línea especial de financiación destinada a cubrir las necesidades de liquidez de autónomos, pymes y gran empresa, con aval del Estado y gestionada por el ICO, hasta el momento ha recibido más de 9.750 solicitudes por importe superior a 1.200 millones de euros, por encima del cupo asignado al banco. Las operaciones asociadas al primer tramo han sido ya formalizadas por completo y las del segundo tramo están formalizándose y evaluándose también.

REFUERZO DE LA DIGITALIZACIÓN BANCARIA

Desde la aplicación del estado de alarma, la entidad ha puesto en marcha también medidas para preservar la salud de empleados y clientes, y mantener la continuidad de su actividad como servicio esencial. A lo largo de estas semanas, ha mantenido abiertas el 97% de las oficinas de la red comercial, donde se han adoptado medidas de seguridad y prevención. En la sede central del Zaragoza, más del 80% de sus empleados están en situación de teletrabajo.

El banco destaca que la estrategia de digitalización desplegada en los últimos años le ha permitido «mantener la calidad de servicio». La operatoria en los canales no presenciales supone el 79% del total, frente al 72% de final del 2019. En particular, el número de usuarios de la app de Ibercaja creció hasta abril un 5,7%, hasta 457.000, y las llamadas en los call center aumentaron un 58%.

Para canalizar donaciones hacia la cobertura de necesidades acuciantes de las personas más vulnerables, Ibercaja y sus fundaciones accionistas han puesto en funcionamiento las plataformas solidarias Vamos en los territorios donde tiene mayor implantación. Hasta el momento se han recaudado 700.000 euros.