Aragón crecerá este año un 3,3 por ciento según las últimas previsiones de Ibercaja, que eleva dos décimas las perspectivas de crecimiento económico para la comunidad y mantiene las de España en un 2,8 %, cinco décimas por debajo de la región.

La entidad eleva así sus previsiones de crecimiento de la economía de Aragón ante una mejoría del consumo privado, con un crecimiento del 3,8 por ciento hasta mayo, y de los sectores de la construcción y los servicios, que han acelerado en los últimos trimestres frente a una menor expansión de la industria, con un comportamiento menos homogéneo que el año pasado, y las exportaciones, que han caído especialmente en la automoción.

Esos son algunos de los datos que hoy han destacado el director financiero de Ibercaja, Antonio Martínez, y el experto en análisis económico de la entidad Santiago Martínez acerca de la coyuntura económica mundial, de España y de Aragón que recoge el número 65 de la revista "Economía Aragonesa" que edita el banco.

Estas previsiones más optimistas con la evolución de la economía aragonesa se sustentan en un mejor comportamiento del consumo privado y los servicios que en el conjunto del país a pesar del menor dinamismo observado en el primer trimestre del año en la producción industrial y las exportaciones.

En ese sentido, la entidad recoge en su análisis que las exportaciones hasta abril fueron desiguales según el sector, con una caída en la automoción del 13,1 por ciento interanual frente al crecimiento del sector agroalimentario, del 17,2 %, mientras que la industria aragonesa ha perdido vigor, con un crecimiento de la producción industrial del 3,2 por ciento hasta mayo frente al mismo periodo de 2017 cuando ese año el incremento anual había sido del 6,2 %.

Mientras, ha remarcado Santiago Martínez, la construcción creció en el primer trimestre un 8 por ciento y los servicios si situaron por encima de la media de España, y sobre todo ha mejorado el consumo privado, con un incremento del 3,8 por ciento, el más alto del país.

Esta es una de las bases para esperar un mayor crecimiento en Aragón que en España, ha dicho Santiago Martínez, quien no obstante ha advertido de que hay más amenazas a medio plazo de las que se veían hace unos meses, como la "guerra comercial" entre Estados Unidos y China.

En cuanto a las perspectivas de empleo en Aragón, ha subrayado que el incremento que experimente la comunidad es "sólido" y a dos o tres años vista hay margen para que crezca sin crear "cuellos de botella" y por tanto a partir de ahora podría acompañar una subida salarial.

En la rueda de prensa también han intervenido tres de los responsables de los monográficos de la revista, entre ellos Marco Marcos Sanso, catedrático de Análisis Económico de la Universidad de Zaragoza, en su caso con un análisis de la evolución industrial de Aragón después de la crisis.

Según Sanso, detrás del menor crecimiento de la economía de Aragón entre el segundo semestre de 2015 y 2017 a pesar de su mayor industrialización está precisamente una peor marcha de los precios industriales, porque el sector en Aragón no respondió con agilidad a la caída de las materias primas, y eso le hizo perder mercados nacionales.

Además, ya en época de recuperación, el sector perdió hasta 14.000 empleos, y eso evidencia un problema importante y de hecho la recuperación todavía no se ha producido. Ha concretado, al respecto, que la pérdida de empleo ha afectado a 14 de las 29 ramas de la industria y de esas 14, cinco ya se han recuperado pero 9 tienen problemas estructurales, entre ellas el textil, la extracción de antracina, lignito y hulla, la confección textil o el cuero y el calzado.

No obstante, ha subrayado que el primer semestre de 2017 se comportó mejor en precios y en el segundo, el sector reaccionó y mejoró los indicadores hasta el punto de que Aragón fue la comunidad que más creció el año pasado -un 3,6 %-.

Por su parte, el presidente de CEOE Aragón, Fernando Callizo, analiza en la revista el marco normativo que afecta a las empresas, una "marabunta" legislativa entre las distintas administraciones que derivó el año pasado en una producción en boletines oficiales de casi un millón de páginas que limita la competitividad de empresas y su desarrollo, teniendo en cuenta que el 95,4 % tiene menos de diez empleados.

España, ha subrayado, tiene una "hiperregulación absoluta" que obliga a las empresas a dedicarle recursos cuando su misión es generar empleo y riqueza, por lo que ha reclamado regular pero de forma clara, simplificando y armonizando entre todas las administraciones públicas.

Finalmente, Ángel Alloza, director y secretario general de Corporate Excellence, ha expuesto la importancia del "propósito" como palanca de transformación de las empresas, la "revolución" de los intangibles -la marca, el prestigio, el capital humano, la innovación, el capital relacional y el medio ambiente- que hoy representan al menos la mitad del valor y del riesgo de las empresas y saber gestionarlo es lo que sustenta los liderazgos.