Ahora que el Tribunal Superior de Justicia de Aragón (TSJA) ha declarado nulo de pleno derecho el plan especial que posibilitaba la construcción de Torre Village, que incluía usos comerciales como el outlet o actividades de ocio y restauración, se ha puesto de manifiesto el volumen de obra ya ejecutada que adquiere un valor crucial a la hora de valorar el perjuicio económico que podría suponer dar marcha atrás a las obras. No solo por esa supuesta indemnización económica que ya se verá si se produce o se reclama, sino para valorar el esfuerzo económico que se lleva realizado hasta el momento. Un 70% de obra realizada que se refiere únicamente a la obra civil propia del outlet, valorada en 60 millones de euros, lo que se traduce en un desembolso que supera los 40 millones de euros en los meses que lleva en marcha la construcción.

Son datos que la empresa promotora Iberebro guarda y que prefiere no confirmar ni desmentir, pero que tampoco es el montante global de dinero destinado a su proyecto hasta el momento. Por varias cuestiones, ya que se excluye de este importe una cuantía nada desdeñable como es la urbanización y los accesos. Solo por la primera, se estimaba el coste de los trabajos a realizar en más de 10,5 millones de euros, IVA incluido, y es por el momento la parte de las obras que más avance muestran. Aunque a la vista no se aprecien el acabado definitivo en zonas como el aparcamiento exterior que dará servicio al complejo comercial.

En estos números tampoco entran los accesos que, según Iberebro, ya se han concluido y que están incluso recepcionados por la Demarcación de Carreteras del Ministerio de Fomento. Esta, antes de comenzar los trabajos, presentó un informe contundente que advertía del riesgo de «colapso» en la circulación de la carretera de Logroño que podría provocar el funcionamiento habitual de esta gran superficie. Eso obligó a la empresa a rehacer el proyecto para incluir esta intervención. Una actuación que incluía el retranqueo de las instalaciones de la antigua factoría o un nuevo vial que la promotora ha tenido que ejecutar y cuyo coste podría superar los 4 millones de euros adicionales.

Entre todas las obras realizadas hasta el momento en este punto kilométrico de la N-232, tanto la obra civil como la urbanización, nuevos accesos o redes de servicios, el montante global desembolsado por ahora ascendería a unos 60 millones de euros. Es una cifra que, sin ser un dato oficial, ya conocen muchas de las entidades vinculadas al sector comercial. Y que crecerá rápidamente en los ocho meses que restan de obras, ya que el porcentaje de ejecución ahora aumentará a mayor ritmo que en el inicio de los trabajos.