Sorprende el resultado de la restauración de la iglesia del Piquete, también conocida como de la Asunción. Emplazada en el alto de La Corona, sobre el municipio de Quinto de Ebro, este bello ejemplar mudéjar luce ahora todo su esplendor, gracias a las sucesivas restauraciones llevadas a cabo desde DPZ con un importe de 400.000 euros y que comenzaron en el año 1984.

Tal como explica Marisa Fanlo, diputada provincial de Restauración, en la primera intervención que se realizó gracias a la DPZ hubo que proceder al derribo de todas las partes de la torre que se encontraba en peligro de ruina inminente, reconstruir cornisas, realizar nuevos forjados y proceder al levantamiento de las esquinas con pilastras

No en vano, esta iglesia parroquial, uno de los más interesantes exponentes del mudéjar aragonés, tuvo que ser cerrada al culto en los años 50, debido en gran parte a los importantes desperfectos que sufrió durante la Guerra Civil. Al estar ubicada en un alto sufrió los efectos de la artillería por lo que resultaron dañados numerosos elementos del edificio: muros, galerías, tejado, pórtico y la torre, especialmente la cara oeste que había quedado completamente destrozada.

DOS DECADAS DE RESTAURACION A lo largo de los años, y gracias a las aportaciones de los planes bienales de Restauración de Bienes Inmuebles de la DPZ, se han ido acometiendo diversas partes de la rehabilitación: torre, cubiertas, fachadas...

En este último plan se ha concedido a esta iglesia una subvención de 75.000 euros para que puedan comenzarse las obras de rehabilitación en el interior, donde los restos de pinturas mudéjares son evidentes. De esta forma, explica Marisa Fanlo, "la diputación es fiel a la política del servicio de restauración, que pretende concluir los diferentes monumentos, para que estos puedan tener un uso adecuado".

La iglesia de la Asunción de Quinto de Ebro formaba parte de un conjunto de carácter defensivo situado sobre una colina que domina el pueblo y que se conoce como La Corona. Construida fundamentalmente con ladrillo, aunque se utiliza la piedra en algunos elementos destacados y yeserías en la decoración de ventanales y jambas, se trata de un templo de una sola nave. Esta está formada por dos tramos, con ábside pentagonal, torres a los pies y ándito sobre las capillas laterales.