El Juzgado de Instrucción número 4 de Zaragoza acaba de imputar a una dentista de la capital aragonesa, identificada como S. C. A., por la presunta comisión de un delito de lesiones por imprudencia con respecto a una paciente a la que colocó unos implantes.

La magistrada encargada del caso, Beatriz Muñoz, así lo ha decidido después de recibir el informe realizado por los especialistas del Instituto de Medicinal Legal de Aragón (IMLA) en el que concluyen que las complicaciones posteriores a la intervención quirúrgica se debieron a que «hubo una deficiente valoración, así como una ejecución imperfecta de la misma».

Los forenses destacan que «no se tuvieron en cuenta ni las condiciones biológicas de la paciente, ni se utilizó el material y la técnica adecuados» para las labores propias en el implante de piezas dentales.

ERRORES / También resaltan «por evidente» que los implantes no están bien situados y, por ende, «no son funcionales, están desalineados, fuera de la tabla vestibular en la que se localizan las piezas dentales y que no pueden soportar carga alguna».

Un resultado que achacan a que la investigada realizó la colocación de los implantes «sin mas estudio previo que uno básico como es la ortopantomografía (toma de imágenes), lo que implica tanto un desconocimiento de las posibles patologías que pudieran intervenir en su pronóstico, como de las características en cuanto a calidad y cantidad ósea». En este sentido, los forenses señalan que en las valoraciones de este tipo de usuarios no deben realizarse a través de radiografías, «ya que no suministran información espacial». Por ello, afirman que lo que debería de haber realizado la dentista es un estudio del hueso porque «la mujer había perdido dientes, lo que produce una irreversible absorción ósea con atrofia en los maxilares». «El grado de reabsorción es importante para saber el tipo de implante», apuntan.

Todo esto provocó en la paciente, representada por la abogada Carmen Sánchez, una serie de úlceras, así como fracturas que llevaron al servicio de Urgencias de un centro hospitalario a retirar los implantes realizados en la mandíbula superior. De hecho, tras ser retirados las molestias desaparecieron, según señalan los estomatólogos que trataron a la denunciante tras solicitar ayuda médica por los intensos dolores que presentaba. Las heridas fueron como consecuencia de la presión o roce de una prótesis no adecuada a las características anatómicas de la paciente.