El caso saqueo, en el que el Juzgado de Instrucción número 1 de Zaragoza investiga presuntos delitos de malversación por más de 50 millones de euros en la plataforma logística, entró ayer en una nueva dimensión: José Luis Bellido, jefe de obra de la UTE liderada por Acciona que ejecutó las obras del complejo, declaró ante el juez, José Ignacio Martínez, que la unión empresarial sobredimensionó algunas infraestucturas --y las cargó a la empresa pública-- de las que se benefició Arcosur. Esta urbanización la estaba ejecutando una unión empresarial con el mismo accionariado y que también tuvo el mismo gerente --el imputado José María Jordán-- desde el 2006.

Eso, según el testimonio de Bellido, ocurrió con un emisario de aguas pluviales y un colector dirigidos al Huerva: fueron sobredimensionados en relación con las necesidades de Plaza, se enganchó a ellos Arcosur y los pagó Plaza, sostuvo. El testimonio del exjefe de obra abre una nueva vía de investigación.

Bellido, detenido el jueves por la Brigada de Blanqueo de la UDEF (Unidad Central de Delincuencia Económica y Fiscal), quedó ayer en libertad tras declarar ante el juez.

Antes que él compareció en la sala de vistas número 3 del edificio Fueros de Aragón de Ranillas José Luis Rodríguez Cachafeiro, responsable de administración y contabilidad de la UTE al que Bellido se refirió como "la mano derecha" de Jordán y que se negó a declarar, como ya hizo el día anterior ante la UDEF.

El juez, a petición de los fiscales Anticorrupción José Grinda y Juan José Rosa, le embargó los saldos de sus cuentas bancarias y lo mantiene imputado como presunto autor de un delito continuado de falsedad y de otro de malversación. Debe personarse los días 1 y 15 de cada mes.

Bellido, por su parte, fue detenido como presunto autor de un delito de falsedad por aparecer su firma en decenas de facturas en las que no figuran las de los jefes de producción de las unidades de la UTE que recibían esos suministros. Eso, dijo, respondía a una orden de Cachafeiro: debía firmar solo él si el suministro era para más de una unidad.

El ingeniero, que llegó a la UTE avalado por MLN y que fue despedido el mismo año que accedió a la gerencia Jordán, ratificó ante el juez la declaración que el jueves hizo ante la Policía. En ella explicó que había rechazado firmar algunas facturas y admitió que en ocasiones, cuando se las pasaban, tuvo la sensación de que le estaban engañando. Otras veces, dijo, Cachafeiro le pasaba un elevado volumen de documentos para que, apelando a la urgencia, le fuera difícil cotejar su contenido.

Mari Mar Jaso, administradora de Lexton --facturó 1,3 millones a la UTE Plaza entre el 2004 y el 2007--, quedó en libertad el jueves tras acreditar que ella adquirió la sociedad en el 2010.

Por otro lado, el empresario Miguel Cantero aseguró que organizó el cargo a la UTE de las obras del piso de Salou del exgerente de Plaza, Ricardo García Becerril, por orden de este.