La localidad de Bronchales, en la Sierra de Albarracín, sufrió en el día de ayer un incendio que se inició en el vertedero local y afectó a 60 hectáreas de sus proximidades, cubiertas de maleza y árboles.
Fuentes de la DGA informaron de que a las 17.45 horas se dio por estabilizado. Al cierre de esta edición, se habían retirado los medios aéreos y permanecían en el terreno tres cuadrillas terrestres y dos autobombas.
El fuego empezó por la mañana en una zona de vertedero y se vio afectada un área compuesta en un 90% por masa forestal y en un 10% de cultivos agrícolas. Entre las especies dañadas se encuentran sabinas, jaras, enebros y pinos.
En la extinción del incendio trabajaron medios del Gobierno de Aragón: las cuadrillas helitransportadas de Teruel y Calamocha; dos helicópteros, de Teruel y Calamocha; el helicóptero de coordinación Charlie; dos autobombas, de Teruel y Orihuela; y tres cuadrillas terrestres, Alto Tajo, Pinar Grande y Montes Universales, así como una máquina pesada.
Además, se contó con la ayuda de dos autobombas y dos cuadrillas de Castilla La Mancha, que se retiraron a las 18.00 horas. También participaron varios medios del Ministerio de Medio Ambiente, entre los que figuraban dos aviones de carga en tierra, la BRIF de Daroca, un avión de coordinación y la unidad de análisis y planificación. Además, se contó con la intervención de Bomberos de Diputación Provincial de Teruel y algunos voluntarios.
Tras estabilizar el incendio se continuó trabajando y permanecieron en la zona tres cuadrillas terrestres y dos autobombas de la comunidad autónoma de Aragón y bomberos de la DPT.
Se ha abierto una investigación para averiguar las causas que han podido originar este fuego, que produjo una densa columna de humo visible desde numerosos puntos de la comarca.
RÁPIDA ACTUACIÓN
No se descarta que las llamas tuvieran su origen en las altas temperaturas que afectan este año a gran parte de Aragón, incluidas las sierras del Sistema Ibérico. Además, al tratarse de un vertedero y haber vidrios, estos pudieron actuar como potenciadores de los rayos del sol.
La rápida actuación de los medios de extinción fue fundamental para evitar que el fuego se extendiera a las zonas boscosas colindantes con el núcleo de Bronchales, situado en un entorno de gran riqueza maderera, uno de los principales recursos económicos de la comarca hasta hace unos años.
En este sentido, cabe destacar que los montes de Albarracín son objeto de una especial vigilancia para evitar que los incendios forestales proliferen y pongan en peligro los bosques.
De hecho, este control ha evitado durante muchos años que esta parte de Aragón sufra gran cantidad de incendios al verse afectada por prolongadas sequías y otros riesgos.
