Zaragoza se moderniza y su flota de autobuses poco a poco se va convirtiendo en algo más sostenible. La empresa encargada del servicio del transporte público, Grupo Avanza, incorporará en los próximos días cuatro buses 100% eléctricos y 18 híbridos articulados. Con la llegada de estos nuevos vehículos, la media de edad de la flota se reducirá hasta los 7,7 años, la más baja de las últimas décadas.

El alcalde, Jorge Azcón, destacó ayer que la incorporación de estos 24 autobuses son un paso «importante» para la ciudad porque reducen la contaminación tanto en emisiones como en ruidos, motivo principal de la renovación de la flota, y porque permitirán mejorar la calidad del servicio.

Aunque era día de celebración, Azcón fue muy claro. Solo el 27% de la flota es híbrida, lo que supone 94 buses de los 352 de la flota. Así que admitió que «queda un importante número de buses» contaminantes. Está previsto que a lo largo de la concesión con Avanza Zaragoza se sustituyan 253 de los 352, el 72%.

Los eléctricos harán los recorridos de las líneas 21, 30, 38 y 40. Uno de ellos se estrenará hoy mismo y mañana lo hará otro. Los otros dos restantes se lucirán este fin de semana en la I Feria de la Movilidad donde habrá uno estacionado para que pueda ser visitado e inspeccionado por todos los asistentes y el otro realizará recorridos entre la feria y la Zona Test, antiguo Pabellón Digital del Agua. Los híbridos, de la marca Volvo, sustituirán a los de más edad desde hoy mismo.

En el caso de los eléctricos se ha optado por dos fabricantes distintos. Dos de ellos, de la marca BYD K9UB, tienen espacio para 85 pasajeros, 25 de ellos sentados, y los otros dos, de Irizar, permiten transportar hasta a 72 pasajeros, 28 de ellos sentados. Ambos tienen capacidad para sillas de ruedas.

La adquisición de estos vehículos supone una inversión de 2.795.168 euros, que la sume Avanza mediante un programa a 10 años.

Por su parte, la concejala de Movilidad, Natalia Chueca, reiteró la voluntad del equipo de Gobierno por seguir apostando por la renovación de la flota, para convertirla cada día en más sostenible. Actualmente, con un 27% de la flota con buses híbridos, se han reducido las emisiones de CO2 en un 30% y las emisiones de NOx y PM10 en más de un 95%, impactando directamente sobre la calidad del aire. Además, también se minimiza la contaminación acústica.