El 15% de los niños aragoneses son obesos o padece problemas por un exceso importante de peso. La prevalencia de esta enfermedad se ha triplicado en los últimos veinte años y los expertos piden medidas correctoras para hacer frente a esta "epidemia", que también afecta a Europa. Precisamente, un grupo de 150 médicos debate desde ayer en Zaragoza sobre este problema, en el marco de Simposium Internacional sobre Obesidad Infantil.

Uno de los objetivos de este encuentro es planear estrategias para la prevención y tratamiento de esta enfermedad "para no llegar a la situación dramática de Estados Unidos", explicó ayer el austriaco Kurt Widhalm, presidente del Grupo Europeo de Obesidad Infantil. Aún así, y aunque las cifras oficiales hablan de un 15% de niños aragoneses obesos, "otros estudios apuntan a que este índice es incluso superior al de los norteamericanos en el tramo de 6 y 7 años", según apuntó el doctor Luis Moreno, presidente del simposium, que junto a Widhalm y al catedrático de Pediatría de la Universidad de Zaragoza, Manuel Bueno, presentó en rueda de prensa el congreso.

ALTO RIESGO Los tres expertos incidieron en el peligro que la obesidad supone para la salud de los pequeños, que corren riesgo de padecer enfermedades propias de la edad adulta, como la diabetes tipo dos o el hígado graso, además de problemas psicológicos y del aparato locomotor. El sedentarismo y las "tentaciones de la sociedad de la opulencia" son los principales culpables de esta situación. Y lo peor es que el "75% de los obesos en edad escolar, lo serán también cuando se conviertan en adultos", según explicó el doctor Manuel Bueno.

Widhalm añadió que, en países como Estados Unidos, este fenómeno está produciendo que la incidencia de la diabetes tipo dos (adquirida y propia de adultos) haya superado al tipo 1 (congénita) entre los niños. En Aragón, "todavía no se ha llegado a esta situación, pero sí se han detectado niños obesos con síndrome metabólico, enfermedad nueva asociada al aumento de la tensión arterial alta y dislipidemia --modificación del metabolismo de las grasas--, disminución del colesterol bueno, entre otros factores", aseguró Bueno.

Recientemente, el hospital Clínico de Zaragoza participó en un estudio de niños con esta enfermedad que demostró que el 9% padecía intolerancia a la glucosa, "el paso previo a la diabetes tipo dos", .

Los expertos abogaron ayer por la prevención, tanto por el bienestar de los pequeños como por el bien del propio sistema sanitario: "Si los obesos empiezan a serlo cada vez antes, el coste para la salud llegará a ser inasumible".