Un informe realizado por las coordinadoras de afectados por el embalse de Biscarrués, en el río Gállego, denuncia el negativo impacto económico y social que tendría su construcción, además de subrayar la nula utilidad del mismo y los riesgos que conllevaría por la inestabilidad de los terrenos.
El informe ha sido presentado hoy en Zaragoza por el presidente de la coordinadora Biscarrués-Mallos de Riglos, Jesús Estachod, el portavoz de la Coordinadora de Afectados por Grandes Embalses y Trasvases (Coagret), Jesús Samperiz, el empresario de aguas bravas de la zona José María Sopeña y la vecina de Murillo de Gállego (Zaragoza) Sara Pajares.
Según han explicado hoy a los medios de comunicación en Zaragoza, la construcción de este embalse, presupuestado en alrededor de 125 millones de euros, afectaría a varias localidades de la Hoya de Huesca, como Murillo de Gállego, que perderían una actividad económica y social que ha crecido en los últimos veinte años alrededor del turismo que genera el río.
Al respecto, esta actividad, que ha dado "vida y trabajo" a las localidades y ha "repoblado" la zona, como ha afirmado Pajares, ha fomentado la creación de 200 puestos de trabajo directos y 500 indirectos en la zona y ha atraído en 2016 a 80.000 turistas, según ha detallado Sopeña.
El empresario ha destacado que se vería afectada esta actividad económica, puesto que la obra hidráulica impediría el uso del 60 % del tramo del río a su paso por Murillo de Gállego y solo sería utilizable el primer sector, más técnico y que conservaría aguas bravas, perdiéndose el tramo bajo, enfocado a un turismo más familiar, ya que resultaría inundado.
Un hecho que llevaría a la desaparición de las empresas de turismo de aventura que se han instalado en la zona porque serían "inviables", además de afectar a otras actividades en la naturaleza, culturales y deportivas como las bajadas en navatas, jornadas micológicas y carreras que se organizan en el entorno.
Además, ha incidido en que el proyecto vulneraría las directivas europeas de Marco del Agua y de Hábitats y ha apuntado que el objetivo del pantano, que consiste en laminar las avenidas del Gállego, carece de sentido por las pocas crecidas que tiene este río.
Por su parte, Estachod ha destacado que el proyecto que se ha hecho público este año cuenta con "modificaciones sustanciales" respecto al anteproyecto aprobado.
Así, ha informado de que la presa hormigonada tipo "hardfill" que recoge el proyecto alcanzaría cotas de 53 hectómetros cúbicos frente a los 35 iniciales.
Además, ha destacado que este embalse, si tiene por objetivo recoger avenidas, no se usará "prácticamente nunca" y que el propio proyecto recoge que las condiciones geológicas no son buenas, con fenómenos como movimientos de laderas.
Igualmente, ha incidido en que no se ha dicho "ni una sola palabra" acerca del lindano y ha juzgado que se pretenden hacer dos embalses, el de La Sotonera y el de Biscarrués, para un agua "que no se quiere almacenar".
El geólogo de la Universidad de Zaragoza Marcos Marcén, presente en la reunión, ha detallado que el embalse ocuparía un terreno de arcillas y areniscas "no adecuado" y que en la zona de su vaso se han registrado más de cien desplazamientos de ladera.
Además, ha informado de que provocaría más desplazamientos en laderas "altamente inestables" del municipio de Erés (Huesca) y que existiría el riesgo de inundación en esta localidad si se desaguara desde 457 metros de altura.
También se verían afectadas áreas agrícolas en Erés y en Biscarrués por la extracción de casi 1,5 millones de metros cúbicos de grava para su construcción.
Marcén, además, ha criticado la elección del tipo de presa, puesto que en caso de "fallo catastrófico" es "la peor presa que se puede construir", ya que se destruiría en cuestión de minutos.
Esta tarde miembros de Coagret, Marcén, Sopeña, Sampériz y el profesor emérito de la Universidad de Zaragoza y diputado por Podemos en el Congreso, Pedro Arrojo, participarán en una mesa redonda abierta al público en el centro Joaquín Roncal de Zaragoza a las 19.00 horas.
Además, han convocado este domingo una manifestación en la capital aragonesa, bajo el lema "Río Gállego vivo", que partirá a las 12.00 desde la plaza del Pilar y concluirá en la sede de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE), en el paseo de Sagasta.
