Ya han comenzado las obras de rehabilitación en la Casa Don Valero, que es como se conoce popularmente al edificio ubicado en el número 31 de la calle Ramiro I de Jaca, para reconvertirla en un centro adaptado de interpretación del Camino de Santiago. Se trata de la primera fase del proyecto, que albergará el primer centro museístico sobre contenido jacobeo diseñado específicamente para llegar a personas con discapacidad.

Este especial museo forma parte de la red transfronteriza Jacob@ccess, cuyo objetivo es proporcionar y facilitar la accesibilidad de las personas con discapacidad a la cultura y el patrimonio de los territorios atravesados por el Camino de Santiago a ambos lados de la frontera entre España y Francia. Por ello cuenta con financiación de fondos europeos de desarrollo regional de más de 184.000 euros, para costear parte del importe total de ejecución que asciende a más de 590.000. El periodo de ejecución de esta primera fase es de diez meses por lo que su finalización está prevista para abril de 2019.

Los objetivos del centro de interpretación jacobea radican, principalmente, en contribuir a la recuperación de la tradicional notoriedad y del antiguo renombre del tramo aragonés del Camino de Santiago, de tanta importancia histórica para la consolidación del Reino de Aragón en el siglo XI. Este tramo, parte final de la denominada vía tolosana, unía entonces Montpellier con Toulouse y pasaba por el Somport para desembocar en Jaca, donde se sumaba al resto de rutas que atravesaban los Pirineos.

El centro adaptado, en pleno casco urbano de Jaca, se encargará de recrear virtualmente, gracias a las tecnologías digitales, electrónicas e informáticas más avanzadas, los entresijos culturales de esta ruta jacobea, así como las experiencias sensoriales que emanan de su conocimiento. Se trata de una muestra dirigida a las personas que por sus limitaciones físicas o psíquicas no pueden comprobarlo personalmente. Este centro de interpretación será capaz de transmitir las sensaciones que viven los peregrinos en este tramo que guarda tantos y tan valiosos tesoros del románico y del mozárabe.

El centro de interpretación irá en la planta baja y funcionará con independencia del resto del inmueble, donado al ayuntamiento en herencia por los antiguos propietarios, a la muerte de Juliana Pétriz. En la primera planta se alojará la documentación digital y la sede de la asociación de municipios, y en la bajo cubierta, un lugar expositivo.