La ciudad de Monzón se halla inmersa desde ayer, y durante todo el fin de semana, en el homenaje al caballero medieval Guillem de Mont-rodón, que este año alcanza su 18 edición. Se trata de una fiesta centrada en la figura del rey Jaime I, en la época en que, siendo menor de edad, vivía en el castillo montisonense y tenía como mentor a Mont-rodón.
La celebración consiste en una serie de representaciones en las que se recrean distintos momentos de ambos personajes históricos y que se irán sucediendo en el castillo de Monzón y en la ciudad durante hoy y mañana. Este año se incorpora como nuevo elemento un nombramiento en el concejo que tiene lugar en la iglesia de Santa María.
Fuentes municipales que, dado el auge que la fiesta ha ido adquiriendo a lo largo de los últimos años, se ha habilitado un espacio de estacionamiento de turismos en la zona de Cortes de Aragón.
La recreación llega acompañada de un mercadillo medieval que esta edición cuenta con un total de 90 puestos que se despliegan por varias calles y a los que se unen los comercios locales, que se engalanan para la ocasión.
Otros elementos de la fiesta son las atracciones para los más pequeños, actividades didácticas en torno al acontecimiento histórico, distintas demostraciones y el rincón de las peñas.
Se da la circunstancia de que, como ha ocurrido en otras localidades aragonesas, cada año se da una mayo implicación de los vecinos en la celebración, que así crece en participantes.
