Las instituciones descartan levantar un gran auditorio para la Expo 2008 en el meandro de Ranillas. Esta es la conclusión de la reunión mantenida ayer entre responsables del Gobierno de Aragón, del Ayuntamiento de Zaragoza y de la sociedad Expoagua 2008 con la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE) para analizar la viabilidad de su proyecto de un gran equipamiento de 125.000 metros cuadrados.

Técnicos y políticos coincidieron en reconocer las "serias dificultades" de que el macroedificio pudiera estar listo en el 2008, por lo que se optará por recuperar la idea original de construcción de un discreto palacio de congresos de algo más de 12.000 metros cuadrados.

Los participantes en el encuentro no quisieron dar por cerrada la decisión, que será cuestión de "días", aunque resaltaron que sólo quedan dos alternativas viables: construir dicho palacio en la Expo como primera fase del macroproyecto o realizar un edificio de menores pretensiones para el 2008 y reservar la mayor parte de la inversión para el gran auditorio, totalmente independizado. De cualquier modo, el macroequipamiento debería esperar, como mínimo, hasta el 2010 para ser una realidad.

En cualquiera de los casos, la última palabra la tiene la dirección nacional de la SGAE, que se había ofrecido a correr con la mayor parte del coste, estimado en torno a 150 millones de euros, casi 25.000 millones de las antiguas pesetas.

SERIAS DUDAS El delegado de la SGAE en Aragón, País Vasco y Navarra, Ignacio Casado, dejó muy claro que la construcción del auditorio estaba condicionada a su apertura en el 2008, por lo que consideró "muy complicado" que se mantenga si queda aparcado para más tarde. "Las expectativas son menores porque la oportunidad de la Expo hacía arriesgarse a la SGAE en la mayor inversión de su historia. Ojalá que se haga porque es una oportunidad para Zaragoza", sentenció.

Casado, acompañado por uno de los directores de la SGAE, presentó un estudio sobre la viabilidad de construir el equipamiento para el 2008, desarrollado por el arquitecto Santiago Fajardo. "Las ingenierías que hemos consultados y todos los técnicos plantean una dificultad enorme para que esté en el 2008", apuntó.

RESPALDO PUBLICO El viceconsejero aragonés de Cultura, Juan José Vázquez, puso en evidencia las "dificultades" de llegar con "garantías" a la cita internacional, pero subrayó que la DGA "no renuncia" a que se construya una gran infraestructura en Zaragoza.

Vázquez explicó que un edificio de semejantes dimensiones --ocuparía 4,5 hectáreas de superficie y tendría 125.000 metros cuadrados construidos-- implica una gestión "muy compleja" y requiere unos "plazos muy largos". A su juicio, la celebración de la Expo no puede estar condicionada a que uno de los edificios esté acabado en el verano del 2008.

El Gobierno aragonés debe decidir en días qué pasa con el palacio de congresos previsto en el recinto de la Expo, dado que su diseño debe licitarlo para llegar a tiempo. El viceconsejero explicó que el edificio es imprescindible para la cita internacional, dado que debe albergar el centro de prensa, un centro de recepción para autoridades y las grandes actividades que se programen durante los tres meses del evento internacional.

Juan José Vázquez también hizo alusión a las dos alternativas planteadas para el complejo y subrayó que el Gobierno aragonés está dispuesto a "colaborar" en el gran equipamiento planteado por la Sociedad de Autores. "A la SGAE le toca decir", concluyó.