Dos personas fueron anteayer detenidas como presuntas autoras de un delito contra la Hacienda pública al serles intervenidas en el vehículo en el que viajaban 3.498 cajetillas de tabaco de contrabando, cuyo valor en el mercado ascendería a 15.241 euros.

Fueron descubiertos por agentes de la Guardia Civil de la Comandancia de Zaragoza que prestaban servicio en la AP-2, quienes tuvieron sospechas sobre un vehículo con dos ocupantes que circulaba en dirección Madrid, sobre las 22.00 horas. En el interior del maletero hallaron varias bolsas de plástico de gran tamaño, completamente cerradas y perfectamente distribuidas para aprovechar al máximo el espacio.

Los ocupantes dijeron en un primer momento, según fuentes de la Guardia Civil, que desconocían el contenido de las bolsas y que su cometido era su transporte desde la Seu de Urgell (Lérida) hasta Madrid capital, donde debían entregar la mercancía y el turismo.

Una vez abiertas las bolsas, los agentes del instituto armado comprobaron que en el interior había un total de 3.498 cajetillas de tabaco de dos marcas diferentes, todas ellas carentes de las marcas fiscales o precintos acreditativos de haber satisfecho el impuesto correspondiente en España o documento justificativo de su pago.

VERSIÓN Intervenida la mercancía, los dos ocupantes del vehículo explicaron a los agentes que una tercera persona les había encargado el transporte de la mercancía, por lo que habían recibido por adelantado 150 euros cada uno, así como el dinero necesario para costear el viaje.

Los detenidos, que pasarán hoy a disposición judicial, son D. G. M. y G. K., dos hombres de 20 y 21 años y de nacionalidad española y búlgara, respectivamente, vecinos de Alpedrete (Madrid).

Al ciudadano búlgaro, según estas mismas fuentes, le constan antecedentes policiales por hechos similares ocurridos en septiembre de este mismo año.

Al igual que pasa con el contrabando de cachorros --que solo en diciembre se han intervenido 400--, las carreteras aragonesas son un lugar de paso para los transportistas de tabaco. De hecho, 4.200 cajetillas fueron incautadas el pasado 17 de diciembre, también en la AP-2, con destino a Jaén y valoradas en más de 19.000 euros.

JAÉN Por estos hechos J. M. M., un hombre de nacionalidad española, 57 años y vecino de Linares (Jaén), fue detenido por un presunto delito contra la Hacienda pública.

Los agentes determinaron en aquella ocasión que la mercancía podría haber sido adquirida en Andorra la Vella y que la intención del conductor era transportarla hasta Andalucía. La mercancía que transportaba tenía un valor en el mercado negro de 19.295 euros.

No obstante, una de las operaciones más importantes realizada por la Guardia Civil tuvo lugar en el mes de noviembre con el arresto de 50 personas que estaban, supuestamente, perfectamente organizadas para introducir este tipo de tabaco en territorio nacional. Los investigadores estimaron que tan solo en el 2013 habían introducido en España más de medio millón de cajetillas por valor de dos millones de euros.

El tabaco era introducido mediante diversas modalidades, a través de las mugas --senderos montañosos por los Pirineos--, empresas de paquetería y mediante el transporte en vehículos, unos con doble fondo y en otros casos utilizando turismos lanzadera.

La estadística que maneja la Guardia Civil es que este tipo de actuación delictiva va en alza. En el 2006 la Guardia Civil se incautó de 67.000 cajetillas de tabaco procedentes de Andorra, en el 2009, cuando la crisis ya se manifestaba con fuerza, la cifra casi se quintuplicó, alcanzando los 311.000 paquetes. Un fenómeno que está relacionado con los precios, ya que el paquete de Marlboro cuesta en Andorra 3,2 euros, mientras que en España casi 5 euros.