Han pasado 15 años desde que el Ministerio del Interior anunciara a bombo y platillo que la Policía Nacional y la Guardia Civil iban a tener nuevas sedes centrales en Zaragoza adaptadas a los tiempos y a las necesidades propias de estos cuerpos. Llegó la crisis y todo quedó en papel mojado, pero parece que esta vez ya no hay vuelta atrás. El departamento que dirige Fernando Grande-Marlaska está a punto de adjudicar el primer concurso relacionado con la construcción de la nueva comandancia del instituto armado en el barrio zaragozano de Valdespartera. Un total de 18 empresas han pujado para hacer la redacción del proyecto.

El proyecto está incluido en un plan de infraestructuras dotado con 31 millones que también recoge, tal y como adelantó EL PERIÓDICO, la construcción de tres cuarteles de la Benemérita en Sariñena, Tauste y Utrillas, además de la edificación de una nueva Jefatura Superior de Policía de Aragón en el actual complejo de Mayandía. De hecho, según fuentes consultadas, está previsto que el próximo martes el director general de la Policía, Francisco Pardo, se reúna con miembros del Ejecutivo autonómico para tratar este tema. Una cita que, según la DGA, ya estaba prevista «a finales de marzo» pero que tuvo que ser suspendida por la pandemia.

Negociaciones

Sobre la mesa está, inicialmente, una permuta del terreno que dejaría libre la jefatura actual si se trasladara. Un solar que pasaría a manos del Ejecutivo autonómico a cambio de que asumiera gastos del nuevo edificio o de una parcela en otro emplazamiento. Unos detalles que desde la DGA aseguraron desconocer, aunque sí valoran positivamente la «evidente voluntad» de invertir en la comunidad aragonesa, ya que Interior volvió a llamar al edificio Pignatelli «pocos días después de acabar el estado de alarma».

Ambos movimientos hacen entrever que Interior quiere dar una rápida respuesta a una reclamación ya histórica. Ejemplo de esa necesidad es que el complejo de Mayandía no superó la Inspección Técnica de Edificios en el 2016 y, a pesar de ello, en dicho lugar trabajan 650 personas. El arquitecto ya expuso que requería de una reforma valorada en 1,7 millones para cumplir con las medidas de seguridad básicas.

En lo que respecta a la nueva Comandancia de la Guardia Civil, el ministerio sacó a licitación en marzo la redacción del proyecto constructivo, un contrato licitado por 404.000 euros. Se suspendió por el covid-19 y se reactivó hace unas semanas para, finalmente, recibir ofertas de 18 empresas. Del total, las que mejor valoración técnica han conseguido son Ingennus Urban Consulting, Idom Consulting y la UTE GOC-Proyeco. Pero en lo económico, esta última ofrece el precio más bajo, 237.000 euros, y la primera, Ingennus, se acerca más al coste fijado por el ministerio con 320.000 euros. La que resulte adjudicataria tendrá un plazo de 7 meses para redactarlo.

En paralelo, se licitó por 60.000 euros para las pruebas geotécnicas y geofísicas del terreno en el que se ubicará la comandancia, en Valdespartera. Se trata de un solar de 57.500 metros cuadrados junto a la rotonda de acceso al barrio zaragozano. Allí está previsto que se traslade la jefatura de la comandancia de Zaragoza, las unidades de investigación, los Grupos de Reserva y Seguridad (GRS) que están ahora dispersados en Casetas, la sala del 062, una residencia para estudiantes y una galería de tiro. Mientras que el céntrico acuartelamiento del Carmen se mantendrá como sede institucional de la jefatura de la Benemérita en Aragón, además de casa cuartel.

Un papel, este último, que estaba cada vez más en desuso no por su utilidad, sino porque es tal la necesidad de espacio que la Dirección General de la Guardia Civil ha convertido los pisos en oficinas de trabajo.

El propio general jefe del instituto armado en Aragón, Carlos Crespo, reconoció en una entrevista a este diario la necesidad de este nuevo edificio porque «el actual emplazamiento no está preparado paras las funciones que aglutina».

Interior tiene previsto para su construcción una inversión de 17,2 millones de euros. Si se mantienen los plazos actuales, el inicio de las obras podría ser a finales del 2021 o inicios del 2020.

Laboratorio de Policía Científica, otra demanda

Una demanda histórica de la Jefatura Superior de Policía de Aragón es tener un laboratorio propio de Policía Científica. De hecho, para la Expo del 2008 llegó a anunciarse la puesta en marcha de este servicio que clausuraría al cierre de la muestra pero, al final, nunca se puso en marcha. Actualmente, todas las pruebas que la Brigada de Policía Científica tiene que analizar son enviadas a Barcelona. La esperanza es que en las nuevas instalaciones policiales pueda albergar este ansiado proyecto para no tener que depender de fuera y poder mejorar los tiempos de espera.