El interventor del Ayuntamiento de Zaragoza, José Ignacio Notivoli, respondió ayer a la petición del informe solicitado por los grupos municipales del PSOE y de Ciudadanos (Cs) para que calculara el nivel de endeudamiento actual del consistorio y lo hizo afirmando que «no resulta posible» hacerlo. El plazo acababa hoy y ayer llegó in extremis y mientras siguen las espadas en alto entre los socialistas y el Gobierno de Zaragoza en Común (ZeC) sobre si es real o irreal un presupuesto que incluye la captación de 31,5 millones de euros de nuevos préstamos bancarios. Su pronunciamiento se esperaba porque podía desbloquear la situación, y no solo no la resuelve sino que levanta nuevas discrepancias.

El documento expone varias cuestiones relevantes a raíz de que se conociera, como adelantó EL PERIÓDICO, que la deuda del tranvía que debería asumir la contabilidad municipal correspondiente a la subvención al billete sería de 84,7 millones de euros, calculada por la Unidad Central de Contabilidad y Tesorería del consistorio, y que el interventor no pone en duda. Solo añade que «no ha obtenido validación por la Subdirección General de Relaciones financieras con las Entidades Locales del Ministerio de Hacienda», la que notificó, en septiembre del 2018, la prohibición a Zaragoza para captar nuevos créditos bancarios. Y, según esa confirmación, opina que sería «especulativo» calcularlo y comunica que «la única cifra oficial» es la de ese mes, el «126,78%» que provocó el veto, que sería como asumir que la ciudad computará los más de 200 millones de deuda del tranvía con la que él ya manifestó que no estaba de acuerdo.

El otro elemento destacable hace referencia a cómo calcular ese nivel de endeudamiento. Y para ello es necesario conocer, explica, «el importe de los ingresos corrientes liquidados o devengados en el ejercicio inmediatamente anterior». Y para ello sería necesario esperar a la liquidación del ejercicio 2018, que no se conocerá hasta finales de febrero o incluso en marzo.

Con esto, para el socialista Javier Trívez, el interventor viene a «confirmar que es necesaria la confirmación del ministerio» y «da la razón al PSOE», además de que «hasta que no esté la liquidación» no se puede sustentar un presupuesto que incluye captar nuevos préstamos bancarios.

«Estamos ante unas cuentas que no son sólidas y ese es el problema real que tenemos», añadió el concejal, quien recordó que el pasado lunes intentó retrasar el calendario para «intentar hacer viable un presupuesto que poder aprobar», cumpliendo ese 110% de endeudamiento que deja la ley, pero ZeC y CHA se alió con la derecha para no hacerlo y ahora complica esa opción. «El 15 de marzo estallará en una dirección o en otra», manifestó.

zec preguntará a hacienda // Para el responsable de las finanzas, Fernando Rivarés, el interventor «en ningún momento dice que se esté incumpliendo la ratio de endeudamiento para acudir a la deuda para la inversión», que «confirma» la cifra de los 84,7 millones del tranvía «que calcularon los técnicos, no el Gobierno» pero que «si es necesario requerir el pronunciamiento al ministerio para que el PSOE la considere válida, así se hará». «No hay razón para no aprobar el presupuesto. Es una supuesta deuda generada en el 2009 por el Gobierno socialista que jamás ha computado durante diez años y es el PSOE quien parece desear ahora que cuente para disimular una decisión política», la de no negociar las cuentas.

«No hay excusas para no sentarse a negociar», reafirmó el portavoz de CHA, Carmelo Asensio, al conocer el informe de Intervención. En su opinión, el documento «no resuelve nada porque dice que le faltan variables económicas y que se tendrá que decir con una liquidación que no llegará hasta finales de mes o marzo». A su juicio, la valoración de Notivoli «no es concluyente» y lo deja en manos de una voluntad política en la que el nacionalista dijo estar «dispuesto a hacer de intermediario» entre ZeC y PSOE.