Nueva operación inmobiliaria en el mercado logístico-industrial de Zaragoza, uno de los más activos de España. Un inversor privado ha comprado un complejo de 36 naves que suman 10.000 metros cuadrados de superficie, incluidas las zonas comunes, que quiere destinar al alquiler de traseros de gran formato. Se trata de la mayor operación que se ha llevado a cabo en los últimos años en este conjunto industrial del barrio zaragozano de La Cartuja y también una de las más relevantes de la última década en cuanto a mininaves.

Así lo ha anunciado la inmobiliaria CBRE, que asesorado en la compraventa, aunque no desvela el nombre del comprador ni del vendedor, que en esta caso se trata de una entidad financiera. Aún se encuentra en estudio el nuevo proyecto, pero la idea es habilitar las instalaciones para alquilarlas como espacios de 200 o 300 metros cuadrados para todo tipo de usos permitidos, prestando especial atención a los servicios e instalaciones comunes, ya que la calidad de los inmuebles es alta.

CRECIENTE DEMANDA DE PEQUEÑO ALMACENES

“Queremos asimilar las naves a lo que es un trastero con la perspectiva de que sean grandes y económicos”, ha explicado Pablo Asín, representante de la nueva propiedad. “Siempre se conciben las naves industriales para acoger alguna actividad pero existe una demanda creciente para almacenaje”, ha destacado. Guardar grandes enseres, aparcar autocaravanas --en pleno auge actualmente-­- o almacenar estoc de un comercio electrónico son algunos de los posibles usos que se conciben.

Además de la dotación de servicio, como huella dactilar para los accesos, los inversores también se plantean instalar una cubierta solar fotovoltaica para autoabastecerse de electricidad y verter a la red la energía sobrante.

Joaquín Chéliz, del departamento de Industrial de CBRE Zaragoza, ha asegurado que “no se trata de una operación habitual y menos en un polígono como Empresarium, que no está entre los más demandados por los inversores”. Debido a los últimos ajustes en los precios, ha apuntado, “ha comenzado a ser una zona más atractiva y a despertar interés en el inversor”. “Todavía existe mucho producto similar en la zona, por lo que se buscará diferenciar el producto ofreciendo mayores servicios con unas rentas competitivas”, ha concluído.

En opinión de Miguel Ángel Gómez Rando, director de la oficina de CBRE Zaragoza, operaciones como la llevada a cabo en Empresarium “en un tiempo récord”, son “una clara muestra de la actividad inversora actual, muy centrada en light industrial y logístico”. Por ello, ha considerado importante “aprovechar la actual situación, dinamizando con ello el mercado y consolidando a Zaragoza” como uno de los principales focos de inversión entre las ciudades alternativas a Madrid y Barcelona para el inmologístico.