Expertos del Departamento de Medio Ambiente del Gobierno aragonés investigan en el interior del Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido la presencia de un oso pardo que fue avistado y filmado a principios de esta semana por una patrulla de los grupos de montaña de la Guardia Civil (GREIM).

Los investigadores valoran la posibilidad de que el animal avistado sea descendiente de uno de los osos eslovenos que fueron introducidos años atrás en la vertiente francesa del Pirineo para tratar de hacer frente a la crítica situación en la que se encontraba el oso pirenaico.

Uno de los responsables de los grupos de montaña de la Guardia Civil en Huesca, el subteniente Alejandro Monjas, explicó que el oso fue sorprendido la tarde del pasado lunes por los agentes mientras enterraba una oveja en las inmediaciones de las Fuentes de Escuaín, una gruta situada en la zona de Gurrundué, término municipal de Tella-Sin, frecuentada habitualmente por espeleólogos.

El plantígrado, al advertir la presencia humana, huyó rápidamente en dirección opuesta a los agentes, según informa Efe . Uno de los miembros de la patrulla que realizaba en ese instante unas tomas con una cámara de vídeo del acceso a la gruta pudo captar la huida del animal.

El avistamiento fue comunicado a responsables del Departamento de Medio Ambiente del Gobierno aragonés y a un grupo de agentes de Protección de la Naturaleza y del propio Parque Nacional de Ordesa, que se desplazaron el miércoles a la zona en compañía de los agentes para verificar la presencia de rastros del oso.

Los expertos no hallaron huellas del plantígrado al estar cubierto el terreno por un espeso lecho de vegetación, pero recogieron abundantes restos de pelos y de excrementos para su análisis.

El subteniente Monjas explicó que hace años que no se detectaba un plantígrado en el territorio protegido. Semanas atrás, uno de los guardas del Parador Nacional de Pineta informó de que había visto un oso cuando se desplazaba en su vehículo a su puesto de trabajo.