La ciudad de Teruel, o villa como era reconocida en aquella época, está de fiesta. Finalmente, nada ha podido impedir, ni el coronavirus siquiera, que Isabel de Segura y Don Pedro de Azagra contrajeran matrimonio ayer, en la capilla de la logia del Museo Provincial de la capital turolense y en un acto íntimo, ante el rumor de que Diego de Marcilla ha muerto y las prisas de Doña Elfa. El famoso sí quiero reaviva las llamas de esta fiesta que se celebra todos los meses de febrero en la ciudad turolense.
En esta celebración dramatizada que mezcla historia medieval y leyenda, una Isabel hechizada y aturdida ha nombrado a su amado Diego en alguna ocasión, para enfado de Doña Elfa y sorpresa de Azagra, y los hermanos Marcilla han intentado impedir el enlace, pero lo único que han conseguido es que su familia haya tenido que abandonar el lugar.
La boda se celebró con total normalidad, tal y como mandan los cánones de la época, con un ceremonial muy marcado. Asimismo, como es habitual, el secreto mejor guardado fue el traje de la novia, de Isabel, que en esta ocasión fue un diseño de Raisa Pérez inspirado en las figuras del artesonado de la catedral de Santa María de Mediavilla de la capital turolense.
Pérez, la propia diseñadora, explicó que en el vestido destacan colores como el azul marino o el morado buganvilla, porque en la Edad Media eran un signo claro de nobleza, de tener tintes «muy potentes» y justificó que la elección de las telas también se realizó siguiendo el mismo criterio, con telas nobles como la camisa, de un algodón muy puro, terciopelo en la saya cosediza, peyote con seda salvaje anudada y tabardo de seda, todo forrado con piel.
En el bordado también se utilizó mucha pasamanería para dar juego y unidad a todas las piezas del vestido, y las mangas y la sisa cosedizas son la antesala de las mangas cortadas que dejan asomar las camisas, curiosidad de épocas posteriores que no podía falta en la intención de la diseñadora de plasmar un traje de la época lo más realista posible.
La escena, como viene siendo habitual a lo largo de estos últimos días y lo será también este fin de semana, se transmitió a través de la pagina web de la Fundación Bodas de Isabel, en su canal de YouTube, y, posteriormente, tuvo lugar el pregón virtual a cargo del profesor e historiador Carlos Belloso Martin, quien ensalzó la figura de los Amantes de Teruel en distintos ámbitos de la vida cotidiana y su relación de afinidad con la fiesta.
Hoy continuarán las retransmisiones de esta edición virtual de Las Bodas de Isabel de Segura con la Llegada de Diego de Marcilla a las 20.00 horas y el encuentro con Isabel en la alcoba nupcial después de su enlace con Don Pedro de Azagra, uno de los platos fuertes de esta histórica y tradicional recreación medieval turolense, que atrae todos los años a cientos de personas, aunque no ha sido así en esta ocasión por razones sanitarias.
