El coordinador de IU en la ciudad de Zaragoza, Raúl Ariza, apostó ayer por seguir trabajando en una confluencia de izquierdas que ve «imprescindible» de cara al 2019, aunque reconoció que Zaragoza en Común (ZeC) tiene que «actualizarse» y que es necesario buscar mecanismos que garanticen la coordinación y el enlace de la calle con la parte institucional. La conclusión llegaba un día después de que el alcalde Pedro Santisteve fuera reprobado en el pleno por los errores en su gestión.

IU en estos momentos está celebrando un debate interno para decidir si mantienen su colaboración en la marca de confluencia. «Nos sentimos totalmente cómplices de los aciertos y los errores del Gobierno de ZeC» y manifestó que trabajan en lo que puedan ofrecer en una futura coalición de cara a las municipales, algo que «sí o sí» tiene que ir enlazado con los plazos que se fijen a nivel estatal y autonómico.

Desde este partido político han transmitido también que la decisión final de IU Zaragoza se someterá a referéndum vinculante a los afiliados. Con respecto a ZeC, Ariza reconoció que hay cosas que no han funcionado todo lo bien que hubieran deseado y que eso «hay que mejorarlo», sobre todo tras haber detectado «esa especie de burbuja» en la que se vive en el ayuntamiento, como él mismo experimentó en su etapa de concejal durante la legislatura pasada.

ESCENIFICACIÓN POLÍTICA

Recalcó que la situación social ahora no es la misma que en el 2015, cuando se creó ZeC, como cree que se demostró en la reprobación, cuando se produjo «otra escenificación» de quiénes están con «la radicalidad democrática, la participación o la transparencia» y quién quiere «más de lo mismo».

Otro de los debates importantes, dijo, es el papel que deben adoptar las fuerzas políticas organizadas en ZeC, que está definida como una plataforma municipalista de ámbito ciudadano que, desde su inicio, es una coalición electoral de partidos políticos y de personas que, sin pertenecer a ningunas siglas, trabajan «codo con codo» con ellos.

En palabras del dirigente local de IU, ha quedado «muy claro» que la confluencia que se dé de cara al 2019 debe contar con las fuerzas políticas organizadas como tal, independientemente de la participación individual de la militancia.