Los resultados electorales en Galicia y el País Vasco han sido «malísimos», algo que ha llevado a los líderes aragoneses a reclamar una «reflexión profunda» sobre los cambios y las alianzas que será necesario trazar a partir de ahora. El Gobierno de Pedro Sánchez no ha servido como ejemplo para reforzar el mensaje autonómico de los socialistas y las divisiones internas en Podemos han sido de nuevo un lastre a la hora de ofrecer una alternativa.

El secretario de organización del PSOE en la comunidad, Dario Villagrasa, reconoció que les hubiera gusta «un resultado más amplio» al destacar que en las dos comunidades autónomas se ha trabajado mucho desde el municipalismo. Además, consideró que el estar en este momento en el Gobierno de España deberían haber «rentabilizado» más esta circunstancia, a pesar de las difíciles condiciones en las que se desarrolló la votación por culpa de la crisis del coronavirus.

En Podemos, que no estarán presentes en el parlamento gallego, se han encontrado con unas cifras muy negativas que les obliga a replantear su estrategia. La actual secretaria general en la comunidad, Maru Díaz, asumió que los datos «han sido decepcionantes y catastróficos». Y afirmó que este resultado «demuestra» que la ciudadanía castiga las luchas internas», por lo que llamó «a trabajar más unidos que nunca para volver a recuperar la confianza de la gente». Por su parte, su predecesor al frente de la formación morada, Nacho Escartín, aprovechó las redes sociales para reclamar una «autocrítica» que evite «repetir errores».

En la actualidad el partido morado se encuentra dividido en dos sectores irreconciliables y las consecuencias de esta falta de unidad ya se han trasladado a las Cortes de Aragón hasta el punto de que el bloque del cuatripartito llegó a perder una votación tras la ruptura de la disciplina parlamentaria de dos de sus diputadas. «Los espacios del cambio no sirven si se piensan solo como un lugar en el que unas personas dirigen y gestionan, sino que deben incluir la participación de muchísima gente en un proyecto común que aglutine e ilusione para votar, luchar y trabajar en el día a día», destacó Escartín.

CAMBIOS PROFUNDOS

«Toca analizar en profundidad y hacer autocrítica porque es más preciso que nunca forzar el impulso de los cambios profundos que precisa nuestra sociedad desde una visión solidaria, internacionalista y republicana, pegada al territorio pero con un proyecto amplio de país que ni los nacionalismos ni el PSOE tienen ni quieren impulsar y eso exige organización y movilización», destacó el coordinador de Izquierda Unida_en Aragón, Álvaro Sanz.

El bloque de la derecha hace una interpretación mucho más general de los resultados y observa un claro hartazgo de la ciudadanía ante las políticas de Sánchez. «Los ciudadanos han dado la espalda al Gobierno PSOE-Podemos en las urnas. Unos, se han quedado en ultima posición de entre las fuerzas parlamentarias y otros fuera del parlamento, lo que eso demuestra es que frente al Gobierno de Sánchez e Iglesias, hay un proyecto, que es el PP, que es no solo válido, sino también exitoso y muy pronto se verá en España», consideró la portavoz autonómica, Mar Vaquero.

Con todo, la alegría se ve matizada en el País Vasco, pues el PNV podrá gobernar con la ayuda de los socialistas. En ese caso el pacto entre el PP_y Ciudadanos no ha dado los frutos esperados. «Lo que más nos tiene que hacer reflexionar a todos los partidos constitucionalistas, entre los que me gustaría incluir al PSOE, ha sido la gran subida de Bildu en estas elecciones», analizan los populares aragoneses.

CIUDADANOS

En este caso culpan a los socialistas de haber generado el caldo de cultivo adecuado para este ascenso en los resultados. «Está claro que el blanqueamiento de la violencia etarra, el consentimiento desde José Luis Rodríguez Zapatero y ahora con Sánchez a sus pretensiones, les ha dado unas alas que no merecen y que son muy perjudiciales para una sociedad que sigue necesitando memoria, dignidad y justicia», recordó Vaquero.

Una lectura paralela realizan desde Ciudadanos. El portavoz en Aragón, Daniel Pérez Calvo, advirtió de que el «hundimiento» de Podemos ha supuesto una transferencia de votos a la formación independentista. «Existen vasos comunicantes que van desde el populismo al nacionalismo», aseguró al tiempo que restó importancia al fiasco de la alianza electoral con el PP.

En este contexto demandó un «frente amplio» de los partidos constitucionalistas, en una alusión directa al PSOE para que se aleje de la formación morada.