Un jardín en la avenida José Atarés sirve desde ayer de homenaje y recuerdo a las víctimas del incendio del hotel Corona, ocurrido el 12 de julio de 1979. Representantes de la asociación que recuerda a los fallecidos, junto con el alcalde de Zaragoza, Pedro Santisteve, y la delegada del Gobierno en Aragón, Carmen Sánchez, participaron en su inauguración.

El acto coincidió con el 39 aniversario de esta tragedia. Comenzó con una actuación de la violonchelista Nuria Gañet y continuó con la intervención de Juan Ramón Vigón en representación de los familiares.

El siniestro se saldó con 78 muertos y 64 heridos, muchos de éstos con lesiones irreversibles. El fuego se inició en la churrería de la cafetería Formigal, al recalentarse sus 20 litros de aceite, según todos los testigos y los posteriores peritajes, pero el Tribunal Supremo estimó en una sentencia que en la propagación de las llamas intervinieron elementos externos, ya que las altas temperaturas alcanzadas no se correspondían con las de la combustión del mobiliario. La sospecha de atentado, nunca reivindicado, congeló el pago de indemnizaciones hasta el año 2000.