El alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón, llevaba días evitando actos en la vía pública ante la más que evidente posibilidad de que los jardineros se presentaran. Llevan 51 días de huelga y están hartos de declaraciones de intenciones, así que han aprovechado que el primer edil iba a participar en un acto de Atades en el Mercado Central para exigirle únicamente una cosa: que cumpla su palabra.

En la última sesión plenaria Azcón dijo: «Sé lo que tengo que hacer y lo voy a hacer, arreglar el problema» y así se lo han recordado los trabajadores, aparentemente cansados y desesperados por la dureza de la huelga y que aparecieron en manada en cuanto el alcalde entró por el Mercado Central.

Apenas habían lanzado un par de gritos que Azcón ya se ha acercado a ellos diciendo: «¿Podemos hablar un momento?». Una hábil estrategia con la que ha evitado que, en el corazón de la recién reformada lonja, los trabajadores le increperan, como sucedió con la vicealcaldesa, Sara Fernández, en el parque Tío Jorge durante la Cincormazada y que les ha reprochado.

El presidente del comité, Manuel Pina, ha sido el encargado de trasladarle a Azcón sus quejas y reivindicaciones, ninguna de ellas nueva. Le recordaron que el único escollo de la negociación tiene que ver con los pluses que cobran los jefes de servicio y que la empresa quiere que se incluyan en el convenio colectivo, algo que rechazan. «No queremos que les bajen el sueldo ni que se los quiten, lo que queremos es que los asuma la empresa, FCC, y no el ayuntamiento como pretende», ha asegurado ante un alcalde que en ningún momento le ha quitado la razón.

Azcón ha tratado de desviar la conversación recordando los logros de los jardineros y las cesiones por parte del Gobierno de Zaragoza, como ha sido la no división en lotes de la contrata o el incremento salarial durante los próximos cuatro años que les permitará recuperar su poder adquisitivo. «Vamos a centrarnos en lo positivo», ha repetido una vez. El encuentro espontáneo, que se prolongó durante unos diez minutos, finalizó sin incidentes y con unos jardineros respetuosos con el acto de Atades programado.

Este miércoles tienen una nueva cita con la empresa en el Servicio Aragonés de Mediación y Arbitraje (SAMA).