El diputado del PP en las Cortes Javier Campoy ha sido elegido hoy presidente provincial del PP de Zaragoza con el 97,42 por ciento de los votos, en un congreso en el que ha sido el único candidato y en el que ha defendido para Aragón "gobiernos normales", que son "lo contrario a lo que tenemos hoy".

En total, Campoy ha recibido 454 de los 470 votos emitidos -12 han sido en blanco y cuatro, nulos- y, además de expresar su "honor" por liderar el PP zaragozano, ha prometido "entrega, lealtad y fuerza" en su tarea.

Ha reivindicado la unidad como algo esencial para entrar de nuevo en el Pignatelli, en la Diputación Provincial o en el Ayuntamiento de Zaragoza, y ha pedido que el único objetivo sea "ganar y gobernar".

Asimismo, ha considerado que los aragoneses quieren estabilidad y sentido común y, frente a ello, la izquierda que gobierna en las principales instituciones como la DGA o el Ayuntamiento de la capital está "radicalizada".

Esta izquierda, ha proseguido, no gobierna, sino que únicamente busca la confrontación, la división y el espectáculo, lo que cree que se está viendo con el "ataque" a la enseñanza concertada.

Ante ello ha propuesto dos ideas: "la persona por encima de todo" y "la libertad antes que nada".

"Ya está bien de dividirnos entre buenos y malos, ya está bien de que ataquen la libertad, ya está bien de que nos avergüencen", ha exclamado.

Campoy ha sostenido también que Zaragoza y su provincia deben aspirar a más, deben caminar juntas y ha deseado que se hable de la ciudad y de la comunidad autónoma como lugares de oportunidades y no por "chistes" sobre los gobernantes de ambas instituciones.

Ha concluido diciendo que los populares zaragozanos serán "el motor" para que Luis María Beamonte consiga recuperar el Gobierno autonómico para el partido y se ha comprometido a recorrer toda la provincia para ello.

El presidente regional del PP, Luis María Beamonte, ha pedido al recién elegido líder provincial, que le sucede a él en el cargo, que esté al lado de alcaldes, concejales y resto de representantes porque son "la esencia" del partido y, a la inversa, a estos con Campoy.

El PP, a su juicio, está actualmente en disposición de defender su alternativa de gobierno y de recuperar las principales instituciones de la Comunidad Autónoma, que perdió en 2015.

Ha reivindicado también a su formación como un partido "limpio" que se ha dedicado "a lo que tenía que dedicarse", que es trabajar por el interés general, cosa que "otros en esta Comunidad Autónoma no pueden decir lo mismo" y tienen "mucho que callar", ha dicho, sin citar a nadie.

En este sentido, Beamonte ha criticado el "ataque" a la concertada por ser "impropio de un Gobierno serio" y ha asegurado que la no reapertura de 13 aulas en estos centros es "la revancha del presidente contra los 30.000 aragoneses que salieron a la calle a pedir libertad".

Ha aprovechado también para criticar la política fiscal del Gobierno dirigido por Javier Lambán, que cree que no apoya la economía productiva ni el empleo, sino que "solo recauda", y ha expresado su apoyo a los trabajadores de la central térmica de Andorra y a toda la comarca, ante la amenaza de cierre de la planta.

El presidente del PP de Aragón ha responsabilizado al Ejecutivo socialista de José Luis Rodríguez Zapatero de esta situación por "empeñarse" en que Endesa cayera en manos del Gobierno italiano.

Sin embargo, ha expresado su apoyo al Gobierno de Aragón y ha instado a Lambán a que se dirija a sus compañeros del Grupo Socialista en el Congreso para que hagan lo propio con el Gobierno de España.

Por último, ha criticado también que se hayan tardado cinco meses en aprobar unos presupuestos que, además de llegar tarde, serán de "difícil ejecución".

En clave nacional, la vicesecretaria de Estudios y Programas del PP estatal, Andrea Levy, ha deseado "lo mejor" al PSOE y ha confiado en que no salga de sus primarias "pareciéndose a Podemos", formación a la que cree que debe dejar "el ruido, la bronca y los debates estériles".

Ha reiterado también que España lo que necesita es estabilidad y no "caprichos de quienes no ganaron las elecciones".

"No pueden hacerse mociones de censura como quien hace malabares, a ver si nos salen", ha añadido.

En contraposición, el PP actual, según sus palabras, representa una España que deja atrás "la desazón, los años tristes, de dificultades" y está "orgullosa de sí misma", como ha demostrado el Gobierno de Mariano Rajoy reduciendo el déficit y retornando al crecimiento económico.