Vive uno de sus peores momentos como secretario general de Política de Defensa. Desde distintos sectores se afirma que las versiones dispares vertidas por el ministerio sobre el accidente del Yak-42 han mermado la credibilidad de un departamento que capea las críticas como puede. Javier Jiménez-Ugarte explica a EL PERIODICO DE ARAGON algunos de los interrogantes que aún existen en torno a la mayor tragedia del Ejército de los últimos años.

--Han mandado investigar por qué existe un desajuste de 1.800 kilos de queroseno entre el manifiesto de carga y una caja negra. ¿Pudo deberse al deseo de comerciar con él?

--Hemos pedido que se investiguen estas cuestiones, que aparecerán en el informe preliminar de la comisión. Esa sigue siendo nuestra posición. Pero sí está claro que el avión tenía combustible para llegar al aeropuerto alternativo.

--Ahora bien, si declaraba los 19.000 kilos el sobrepeso de 1.790 kilos hubiera sido evidente. Además, en una denuncia que llegó al ministerio se hablaba de que en un Yak-42 parte de la carga iba con el pasaje...

--En esa queja se dice que el equipaje del personal tuvo que ir en la cabina, porque no cabía todo en la bodega. Que el avión tuviera exceso de peso puede perjudicar a la compañía y pondría en entredicho a los tripulantes. Pero por ahora no tengo claro el sobrepeso.

--Este problema está relacionado con el quinto piloto, al que después de negar su existencia se define ahora como gestor de vuelo, una figura desconocida. Muchas familias creen que ese bielorruso trapicheaba con el queroseno.

--La compañía aérea dijo que era una tripulación doblada, es decir, de cuatro pilotos. De repente me encontré con una pregunta parlamentaria que quiere volver a presuntas contradicciones, aludiendo a que el ministro en una ocasión habló de cinco. No lo recuerdo, pero quizás lo dijera. Y la terminología que dimos era la que consideramos apropiada según lo que nos comentó la compañía.

--Ayer fue un día crítico para Defensa. El informe elaborado por el coronel Fortún refleja un conflicto con la agencia de la OTAN Namsa y que no se inspeccionaron los aviones ex-soviéticos a pesar de las 14 irregularidades denunciadas...

--El director de Namsa me llamó preocupado. Pero el informe es un documento independiente de un jurista, pedido por el ministro. No es la posición oficial de Defensa. No existe ningún contencioso con la OTAN. Además, la responsabilidad es compartida, porque el Estado Mayor Conjunto también tenía derecho a inspeccionar los aviones.

--Pero el texto deja claro que una de las quejas sobre seguridad se planteó antes del accidente...

El documento no responsabiliza a Namsa del siniestro, sólo cita la falta de corrección de irregularidades en otros vuelos. Sí es cierto que algunas cosas se pudieron hacer mejor.

--Uno de los principales problemas reside en las continuas contradicciones de Defensa. ¿No cree que han perdido la credibilidad?

--Las contradicciones son fruto de la absoluta transparencia. Hemos respondido a más de noventa preguntas parlamentarias y el ministro ha comparecido dos veces.

--Entonces, ¿por qué no se ha aceptado la creación de una comisión investigadora nacional?

--Se ha solicitado por razones políticas y creo de verdad que no sería útil para averiguar las causas reales del accidente.

--¿Qué motivo tuvieron para no decir a las familias que los objetos con los que se identificó a los fallecidos estaban en los féretros?

--En las reuniones de Burgos y Zaragoza se les comentó que los anillos y chapas que habían ayudado a la identificación quedaron por orden del juez turco en los féretros. El juez no dijo probablemente que se enterrasen, sino que viajaran con los restos. No se prohibió abrir el ataúd a nadie, aunque algunas viudas dicen que sí.

--Ya, pero no se les avisó antes de los entierros...

--Probablemente, eso sea correcto. Se pudo avisar, pero si yo fuera un allegado, en aquellas fechas habría preferido un entierro tranquilo.

--Ningún miembro del equipo médico español era forense...

--Los médicos en las Fuerzas Armadas no tienen titulaciones de forense. Quizás pudimos mandar uno civil. Pero el médico que trabajó como jefe del equipo tiene estudios de Medicina en accidentes aéreos. ¿Que debieron estar más tiempo? Quizás los familiares nos habrían criticado si les hubiéramos dicho que las identificaciones iban a demorarse.

--Según usted, no se hicieron pruebas de ADN para evitar el mal trago a las familias. ¿No deberían haberles consultado?

--El fiscal de Trabzon me dijo que tardarían semanas, aunque creo que en unos días se podrían haber practicado. Si el médico hubiera dicho que no se podían reconocer los cuerpos, se habrían realizado. El Gobierno no hubiera sufrido una crisis.

--Sí, pero la tensión habría sido muy alta...

--Nadie lo habría prohibido si el general lo hubiese creído necesario.