La poesía, una actividad que no tiene reposo y que manifiesta las cosas que se llevan dentro, es la forma de expresión predilecta de José Verón Gormaz, poeta, narrador, periodista y fotógrafo que hoy ha recibido el Premio de las Letras Aragonesas 2013 por su dilatada trayectoria multidisciplinar.

Autor de más de 20 libros de poemas, además de narrativa, ensayo y libros fotográficos, Verón (Calatayud, 1946) ha recibido hoy del Gobierno de Aragón el reconocimiento "al camino recorrido en muchos años", algo que valora como "muy valioso" y que le ha supuesto "una sorpresa muy grata", según ha asegurado en declaraciones a Efe.

A la hora de recibir el premio, cuya entrega ha presidido la jefa del Ejecutivo aragonés, Luisa Fernanda Rudi, el poeta bilbilitano ha querido poner en valor la necesidad de la cultura para mejorar la convivencia.

El 80 por ciento de su obra es poesía, su forma de expresión preferida para sacar fuera "las cosas que se llevan dentro", y que aún hoy, en el imperio de lo tecnológico y digital, continúa componiendo a la antigua usanza, en papel y con pluma, aunque las últimas correcciones las hace en el ordenador.

Verón define la poesía como una actitud "que no deja reposo" y de las que hay que estar "siempre con ella" y quizá por eso no tiene intención de retirarse ni de dejar de escribir porque la literatura "es un trabajo constante".

Narrador y ensayista, ha ejercido también el periodismo, campo que "hace tiempo" que no practica, y la fotografía, disciplina que sigue cultivando aunque "más como afición" que de forma profesional.

Su prolífica actividad productiva tendrá su continuación a mediados o finales de mayo con la publicación de "Cuentos para sentir las horas" que se sumará este año a la reciente edición del libro de poesía "Sala de los espejos" del que ya firmó ejemplares en el Día del Libro celebrado el pasado miércoles, 23 de abril.

Además, hoy se presenta el libro conmemorativo del Premio de las Letras Aragonesas que edita el Gobierno de Aragón, que se titula "Un mar de montes" y que recoge una selección de su obra poética y narrativa.

Este año 2014 también verán la luz un cancionero "cercano y popular" que edita la Institución Fernando el Católico y la reedición "corregida y aumentada" de "Naufragio perpetuo" con el que logró el Premio Hermanos Argensola de Barbastro (Huesca) en 1999.

Además el centro de la UNED de Calatayud expondrá a finales de mayo el trabajo fotográfico recogido en "El silencio viviente" que se estrenó en Zaragoza en 2010.

El Premio de las Letras Aragonesas se incorpora hoy a una larga lista de reconocimientos a José Verón Gormaz, como la Medalla de Oro de las Cortes de Aragón del año 2006 que supuso para él "una inyección de ánimo y mucha moral" en un complicado momento vital.

Además del premio San Jorge de narrativa en 1981, el Isabel de Portugal de 1984 en poesía y el ya citado Hermanos Argensola de Barbastro de 1999 en esta misma disciplina, cuenta, entre otros, con el Premio Nacional de Fotografía o el Internacional de San Sebastián en esta expresión artística.

El ayuntamiento de su ciudad natal, de la que es Hijo Predilecto, también ha reconocido su figura con la creación, en 2008, del Premio Internacional de Poesía "José Verón" que durante las tres primeras ediciones fue anual y que, por motivos económicos, se ha convertido en bienal.

"Me siento reconocido y querido en mi tierra", dice Verón, quien agrega que ello le produce "una agradable sensación" porque, pese a los grandes problemas, asegura estar en un mundo que, hoy por hoy, "es grato".

Luisa Fernanda Rudi ha destacado la sabiduría y la potencia lírica del trabajo de Verón, así como la "generosidad de una obra entregada a la belleza".

La presidenta de Aragón ha resaltado el bagaje cultural del galardonado, "un artista que explora el mundo", y la musicalidad de su lenguaje, propio de los más grandes poetas.