El magistrado del Juzgado de Instrucción número 1 de Zaragoza, José Ignacio Martínez, está tratando de identificar a dos empresas que pagaron elevadas cifras a Pulsar Consultoría e Inversiones, la empresa de Carolina y Patricia García Planté, las hijas del exgerente de Plaza, Ricardo García Becerril.
El juez, que instruye el llamado caso saqueo o pieza principal de los casos Plaza, ha dado cinco días al contable de la empresa de las García y del Grupo Margalejo, Francho Chabier Blasco, imputado en la causa, para que identifique a los autores de un pago de 58.000 euros efectuado en el 2007 y de otro de 120.131 realizado en el 2008 que la Agencia Tributaria atribuyó por error a Maguitel, una filial de Porcelanosa.
El presidente de esta última empresa, Manuel Miguel Colonques, declaró la semana pasada como imputado en el caso saqueo. Lo hizo un día antes de que el contable le asegurara al juez que en esos momentos no recordaba quién había hecho esos desembolsos.
Por otro lado, el instructor de la causa ha levantado el embargo que pesaba sobre el velero Governador, lo que permitirá a su actual propietario venderlo y alquilarlo. La embarcación, comprada por un precio declarado de 45.000 euros y vendida por 36.000 cuando su valor de mercado casi duplica esa cifra, estaba a nombre de Pulsar, aunque quien negoció tanto su adquisición como su enajenación fue García Becerril, que era también quien lo pilotaba por el Mediterráneo. Se deshizo de él a las pocas semanas de ser detenido.
