La Subdelegación del Gobierno en Zaragoza deberá emitir un informe en el que especifique si fue correcta o no la tramitación de los expedientes de la Oficina Única de Extranjería que han llevado a la imputación de catorce personas --entre ellas un funcionario de ese organismo, Joaquín P. A.-- como presuntos integrantes de una trama que se lucró cobrando mordidas y recibiendo favores a cambio de agilizar los trámites.

El magistrado del Juzgado de Instrucción número 12 de Zaragoza, Alfonso Tello, ha ordenado, a propuesta de la Fiscalía, la elaboración de ese informe a la Subdelegación, cuyos responsables también tendrán que pronunciarse acerca de si habrían terminado con resoluciones favorables en el caso de no haber participado en su tramitación el funcionario imputado.

Este negó ante el juez que hubiera cometido ninguna irregularidad y respondió a las preguntas sobre la veintena de expedientes sospechosos, que le fueron mostrados, uno por uno, en un largo interrogatorio. No había participado en los trámites de varios de esos legajos.

JURADO La Fiscalía también se ha pronunciado en contra de que ese asunto pueda ser enjuiciado por un jurado popular, a pesar de que tanto el cohecho como el tráfico de influencias son dos de los delitos que la legislación asigna específicamente a ese tipo de tribunales.

Por otro lado, la suspensión cautelar de empleo de seis meses que pesaba sobre el funcionario ha finalizado ya, por lo que este ha vuelto a trabajar. Sin embargo, ahora ocupa un puesto en la Subdelegación del Gobierno y no en la oficina de la calle Obispo Covarrubias, en la que estaba destinado cuando fue detenido el pasado mes de octubre.

El magistrado, por otro lado, ha levantado la orden de alejamiento que le impedía acercarse a las oficinas de Delicias, y que pesaba sobre él desde que fue puesto a disposición del juzgado de guardia tras su arresto.

Durante los interrogatorios, todos los imputados negaron que hubieran recibido dádivas por parte de extranjeros que habían solicitado permisos de residencia y/o de trabajo, así como que formaran parte de una trama que se dedicara a influir en la tramitación de los expedientes aprovechando la presencia de Joaquín P. A., al que alguno de los encartados no conocía.