El caso de la adivina de Magallón ya tiene fecha para el juicio, pero este no se celebrará hasta dentro de un año. El Juzgado de lo Penal número 4 de Zaragoza ha reservado los días 20 y 22 de mayo para la celebración de la vista oral, es decir, dos años después de que el principal acusado, José Laparra, expresidente del club de fútbol de Castellón, irrumpiera en la casa de la vidente para recuperar los 165.000 euros que había pagado a Lucía Martín por un conjuro de amor fallido.

"Es cierto que el juicio aún tardará en celebrarse, pero hay que tener en cuenta el volumen de trabajo del juzgado y el hecho de que se trata de una causa sin preso", señaló ayer José Palacín, abogado de una de las personas que acompañaba a Laparra el día de los hechos.

El expresidente del Castellón se expone a una pena de 11 años de cárcel, la que solicita el abogado de la adivina, si bien el fiscal ha solicitado dos años y ocho meses por los delitos de realización arbitraria del propio derecho, allanamiento de morada y amenazas. El caso ha despertado gran interés. No solo por la personalidad de Laparra, que intentó valerse de medios paranormales para conquistar a una mujer, sino por las circunstancias de la adivina, que vivía con sus padres en una vivienda comprado en Magallón.