Las perspectivas de que el Consocio de Seguros se haga cargo de los gastos provocados por la ruina de la casa azul --el inmueble bilbilitano que tuvo que ser desalojado y derribado tras ser engullido por una sima el pasado 10 de noviembre-- no son muy positivas. Así lo manifestaron los abogados de la comunidad de bienes Justo Navarro 6-8 ante la junta que representa de los vecinos en una reunión desarrollada el pasado viernes por la tarde. Durante este encuentro los letrados y los miembros de la junta decidieron convocar una reunión para el próximo viernes 6 de noviembre con el propósito de notificar a los vecinos las gestiones realizadas para que el consorcio indemnice a los afectados.

En el encuentro, que tuvo lugar el mismo día que este diario anunció que los vecinos comenzaban a intranquilizarse por la falta de información, los letrados plantearon que uno de los puntos de la reunión será votar si se emprenden acciones judiciales contra el propio consorcio si finalmente no paga. El pasado martes los abogados se reunieron en Madrid con este órgano de compensación para esclarecer si habrá indemnizaciones. No obstante, nada han sabido de esa reunión los vecinos hasta la fecha.

RUINA TECNICA Según el reglamento del Consorcio de Seguros los vecinos de la casa azul deberían ser indemnizados si se demuestra que la ruina técnica y económica del inmueble fue consecuencia de "una situación de inundación extraordinaria" producida "con carácter simultáneo".

Por contra, no entran dentro de la cobertura los daños producidos por "la elevación del nivel freático, movimiento de laderas, deslizamiento o asentamiento de terrenos". Asimismo, el consorcio tampoco se haría cargo de los daños si su causa ha sido la "rotura de presas, alcantarillas o canales artificiales, salvo si la rotura se produjo como consecuencia de evento extraordinario".

La reunión del próximo viernes, que todavía no ha sido comunicada formalmente a los vecinos, se espera complicada. Fuentes de la junta de la comunidad de bienes reconocieron ayer que considerarían "un fracaso" que el consorcio finalmente se negara a cubrir los daños. De hecho, en ello se apoyaban las esperanzas de la mayor parte de los vecinos.

Los malos presagios han provocado que algunos vecinos afectados hayan cuestionado durante los últimos días la labor de los letrados contratados por la comunidad de bienes para estas gestiones.

En este sentido, parte de la comunidad se muestra partidaria de solicitar información el mismo viernes sobre las gestiones realizadas por sus representantes legales e, incluso, si fuera oportuno, se propondrá que se vote su continuidad. "No comprendemos por qué no se nos ha informado de nada hasta ahora, y por qué se ha demorado tanto la resolución del consorcio", explicó recientemente uno de los afectados.