El Justicia de Aragón, Ángel Dolado, ha instado a la consejería de Educación del Gobierno de Aragón a que se haga cumplir «la legislación vigente», dotando al área de aragonés (en aquellos centros en los que se imparte la asignatura) de los 90 minutos a la semana que establece el currículo autonómico de educación primaria. De esta forma, el defensor ciudadano indica que se finalizará «con la discriminación que empeora las condiciones laborales de los docentes que imparten dicha asignatura» además de permitir que el alumnado y las familias que eligen dicha área «reciban la oferta educativa adecuada».

Esta resolución llega después de que la asociación de maestros de aragonés denunciara el pasado mes de marzo que se estaba «incumpliendo de forma sistemáticas» el número de horas lectivas de la materia. «La transmisión generacional en las zonas de nuestra comunidad donde se usa como lengua nativa está prácticamente rota, y es necesario trabajar urgentemente desde los centros educativos para su recuperación, por eso, destinar 30 o 45 minutos semanales, casos que se han dado el curso pasado, es un tiempo claramente insuficiente para la enseñanza de una lengua», alertan.

Los docentes reconocen que esta mejora no se podrá poner en marcha durante el próximo curso debido a la situación de interinidad en la que ha estado la consejería tras las elecciones autonómicas. «No obstante, quedamos a la espera de una futura reunión con responsables del departamento, en la cual podamos exponer las grandes dificultades y pésimas condiciones de desempeño de nuestra labor profesional como funcionarios públicos», explican.

Los maestros reclaman «la estabilización y mejora de la situación de las plazas de docente de aragonés» al considerar que eso garantizaría «una mayor calidad de las clases». Por la falta de definición legal en algunos caso el tiempo que se tendría que dedicar a la materia se usa en otras áreas.