Edward Andrés O. R. explicó ayer en la Audiencia Provincial de Zaragoza que cuando dio un puñetazo a otro joven, que le arrancó dos dientes y le fracturó la mandíbula, estaba en medio de una pelea que comenzó por unos silbidos. Según explicó, su contendiente y su amigo iban chiflando algo que él interpretó como un reto de una banda latina, los Black Panther, contra los Dominican Don’t Play. Pese que él no es pandillero, aseguró, se acercó a recriminarles, y terminaron peleando.

Bien distinta fue la versión de la víctima, según la cual, cuando caminaba con un amigo por la avenida César Augusto de Zaragoza, la madrugada del 22 de enero del año pasado, el acusado le abordó por detrás y le pegó directamente un puñetazo, continuando con patadas, ya en el suelo.

Por ello pidió para él 3,5 años de prisión, que el fiscal rebajó a 1,5 y su defensa a 19 meses como mucho.