Un accidente laboral durante unas obras de fontanería en el restaurante del Teatro de las Esquinas de la capital aragonesa sacó a la luz que la empresa contratada para realizar estos trabajos tenía a este empleado sin dar de alta en la Seguridad Social. Ayer, el empresario, Cristian Q. A. se sentó en el banquillo por unos hechos por los que afronta un año y medio de prisión y la inhabilitación laboral.

Ante los magistrados, este hombre reconoció «ser culpable» por no haberle dado de alta. Lo hizo pasado el accidente, cuando acudió a la habitación de la MAZ en la que se encontraba la víctima y le hizo firmar el contrato laboral e incluso cambió el régimen de jornada completa por una parcial. Admitió haberlo hecho mal, pero también señaló que pensó que se había dado de alta como autónomo. Lo que sí negó es que le hubiera ordenado trabajar desde una escalera a una altura de 5 metros desde la que se cayó. «Eso no estaba ni en el presupuesto», señaló. La víctima sufrió politraumatismos.