El Juzgado de lo Penal de Huesca juzgará el próximo mes de enero por un presunto delito de usurpación a un hombre que se enfrentará a una petición fiscal de multa de 1.000 euros por ocupar la casa de la que le habían desahuciado un año antes.

La ocupación de la casa, ubicada en la calle San Vicente de Paul de la capital altoaragonesa, se produjo el 7 de marzo de 2013, un año y dos meses después de que tuviera lugar el desalojo del inmueble por orden judicial.

Según relata el fiscal en su escrito de calificación provisional de los hechos, el acusado, de etnia gitana, dio una patada a la puerta de la que había sido su vivienda y residió en ella hasta el mes de junio del mismo año sin autorización de su nuevo titular.

Al parecer, el inmueble fue adjudicado, en un procedimiento judicial de ejecución hipotecaria fechado en junio de 2011, a la Unión de Créditos Inmobiliarios.

La adjudicación le fue comunicada a finales de ese mismo mes al acusado, quien residió en la vivienda hasta que se produjo el desalojo a instancias de sus nuevos propietarios, el 31 de enero de 2012.

El fiscal tipifica los hechos como un presunto delito de usurpación y reclama la imposición para el acusado una pena de 6 meses de multa con una cuota diaria de 6 euros, hasta sumar un total de 1.080 euros.