Aunque parezca una barbaridad, lo mejor que le pudo pasar a Katrina, un cachorro de Pastor Malinois, es que los dueños que no la querían la abandonaran junto a un poste en la capital aragonesa. Ahora no solo está bien cuidada y recibe cariño, sino que se ha convertido en un miembro más del Cuerpo Nacional de Policía.

Su historia con final feliz se remonta al pasado mes de octubre, momento en el que sus dueños se deshicieron de ella, siendo trasladada como tantos otros perros y gatos en su misma situación a la Centro Municipal de Protección Animal de Zaragoza.

La evolución del cachorro en las semanas posteriores llevó a la veterinaria de dichas instalaciones a contactar con el servicio de guías caninos de la comisaría de Zaragoza para informar sobre las cualidades que reunía la perra para formar parte de dicha unidad. Tras observar el comportamiento de Katrina durante unos minutos, los agentes desplazados a la protectora municipal no dudaron un instante y solicitaron a los responsables del servicio la cesión provisional del animal durante quince días para comprobar su adaptación al servicio policial requerido.

El adiestramiento de la cachorra al servicio no sólo fue inmediata sino que permitió a los responsables policiales comprobar todas las aptitudes que tenía para desarrollar su nueva rutina.

Desde el servicio de guías caninos de la comisaría de Zaragoza señalan que presentó «una óptima socialización ante otros perros y humanos» y que se observaba su «predisposición para jugar y, en consecuencia, para trabajar gracias a su afinado olfato». «Katrina cumplía con creces la esencia de un aspirante a guía canino de la Policía Nacional», recalcan.

Ahora Katrina está a la espera de destino, del mismo modo que le ocurre a los agentes. Ha sido trasladada a Madrid, donde recibirá formación de cara especializarla en detección de drogas, de explosivos, de cadáveres o de dinero. Sus capacidades olfativas serán las que marquen dicho futuro.

Lo que sí saben en la Jefatura Superior de Policía de Aragón es que, a pesar del cariño que le cogieron, no formará parte de su plantilla, ya que el servicio cinológico está en estos momentos al completo. Hay 19 canes que cubren todo el territorio.