De nuevo, el consejero de Sanidad, Sebastián Celaya, ha vuelto a mostrar su rotunda oposición a emprender planes de choque destinados a atajar la lista de espera quirúrgica. En esta ocasión, el titular del departamento ha expuesto su opinión en una respuesta parlamentaria en la que se muestra tajante. «Como se ha dicho en numerosas ocasiones, la gestión de las listas de espera no debe basarse en planes de choque. Se trata de mejorar de forma permanente la variabilidad de las indicaciones, la priorización de los casos y el rendimiento quirúrgico», sostiene el consejero.

De este modo, Celaya rechaza una medida que, de hecho, no ha aplicado en toda la legislatura. Ni siquiera cuando los datos negaban una mejora respecto a los del anterior equipo de Gobierno, que, por cierto, no los publicó durante alrededor de un año. «La evolución de las listas de espera debe valorarse comparando datos de más de un año de evolución, ya que pequeñas variaciones en el número de días laborales de cada mes, incidencias coyunturales en los servicios quirúrgicos, aumento de ingresos urgentes por incidencia de la gripe u otras afecciones por virus, por ejemplo, pueden modificar los datos referidos a un solo mes», advierte Celaya en su respuesta.

EVOLUCIÓN

En este sentido, el consejero presume de los resultados extraídos de la comparativa respecto a los últimos seis años en lo que a lista de espera de larga duración se refiere -más de seis meses-. Según el departamento, en junio del 2012 estaba compuesta por 1.467 personas y en agosto de ese mismo año, los afectados por esta demora ascendían a 2.709. Solo un año después, esa lista de espera la integraban 5.099 y 6.397 aragoneses, respectivamente. En el 2015, esta había bajado hasta los 1.791 pacientes en junio y 2.748 en agosto, mientras que, el pasado año, la nómina de aragoneses en lista de espera en ambos meses se redujo hasta los 1.139 y 1.345, respectivamente. «De la observación de estos datos se desprende que entre agosto del 2014 y del 2017 los pacientes que esperan más de 180 días han disminuido en un 80% y que el crecimiento durante los meses del verano 2017 ha sido el menor de los últimos seis años», subraya el consejero.

El mes de diciembre del 2017 se cerró con 1.701 pacientes en lista, lo que supuso un 37% menos que en enero, ya que el año comenzó con 2.709 aragoneses afectados.