Unos van a disfrutar de sus paisajes, de sus costumbres, de su comida o de su bebida. Otros, en cambio, prefieren conocer a la perfección cada milímetro de su superficie. Irlanda sigue siendo uno de los centros neurálgicos del turismo; también de la alta competición. Dos españoles, uno de ellos aragonés, viajaron el viernes al condado de Londoderry para participar los próximos 3 y 4 de septiembre en el campeonato mundial de arada. No lo tendrán fácil; deberán hacer frente a concursantes de América, Africa, Oceanía y de otros países europeos. Y, por supuesto, a las precipitaciones.

"No creo que gane pero estoy muy ilusionado. Partimos con desventaja porque no tenemos parcelas tan buenas para entrenar", asegura Valero Calvo, el agricultor aragonés que representará a España en el campeonato. Calvo, vecino de la localidad turolense de Vinaceite, concursará en la modalidad de arado fijo mientras que Rafael Escanero, el otro representante español, lo hará en reversible. El objetivo: dejar el pabellón lo más alto posible. Y Calvo parece tener la clave para salir lo mejor parado: "Darlo todo". Y ya lo dio en anteriores ediciones; en su tercer, y hasta ahora, último campeonato mundial fue vigésimo quinto de un total de 60 concursantes.

Calvo tiene una trayectoria profesional más que consolidada. "No tuve la oportunidad de estudiar así que a los once años ya me introduje en el campo", señala orgulloso al recordar sus méritos conseguidos. Y es que este agricultor de 64 años es todo un veterano en subirse a lo más alto del podio; ha sido más de veinte veces campeón provincial de habilidades con el tractor y el remolque, tres veces subcampeón de España y vencedor del torneo a nivel nacional en el 2003. "Y tengo más de 300 trofeos", añade el turolense. Pese a sus dotes con el tractor, Calvo lo tendrá bastante complicado para repetir hazaña "porque los de los países verdes son muy buenos", comenta entre risas al referirse a los competidores de Irlanda y Bélgica.

Nada de ingresos

Para estar entre los mejores en el campeonato mundial, que este año celebra su 51 cumpleaños, Calvo tuvo que ganar el pasado campeonato nacional. Su recompensa: 250.000 de las antiguas pesetas, cantidad que no recibirá el próximo vencedor mundial. Participar en un campeonato de estas características supone un gran gasto "porque allí no te dan nada. Si ganas sólo te llevas el reconocimiento", señala. Tienen que pagarse, incluso, el viaje hasta Irlanda aunque el aragonés goza de mejor suerte que otros: "Me lo financia mi patrocinador".

Valero Calvo, de la Asociación Regional de Agricultores y Ganaderos de Aragón (ARAGA), no estará sólo en Irlanda. Su esposa Pilar, dos de sus hijos, Roberto y Esther, y el secretario general de la Asociación Nacional del Sector de Maquinaria Agrícola y Tractor (ANSEMAT), Miguel Cervantes, le animarán en tierras irlandesas para impedir que la más que probable lluvia anegue su mejor instrumento: la ilusión. ¡Animo!