La mejora de las condiciones ambientales en la cuenca de la laguna de Gallocanta, en los límites de las provincias de Zaragoza y Teruel, ha favorecido la migración de las grullas, de las que el día 14 de noviembre se contabilizaron 35.092 de las 60.000 que en la última semana han podido pasar por este enclave medioambiental.

La mejora de las condiciones meteorológicas entre el 9 y 12 de noviembre ha marcado la evolución migratoria de las grullas, que se reactivó a través de los Pirineos con el consecuente incremento de animales en la cuenca de Gallocanta y demás zonas de invernada en Aragón además de otras de la península Ibérica.

Las ventanas de buen tiempo de este periodo, intercaladas por borrascas con nieve en zonas de montaña, han provocado que el día 14 de noviembre se obtuviera un censo de 35.092 individuos, informa el Gobierno de Aragón en una nota de prensa.

No obstante, la migración otoñal de esta ave desde las frías tierras del norte de Eurasia ha estado caracterizada por su retraso como lo prueban los censos oficiales realizados en las últimas semanas por el Gobierno de Aragón a través de la empresa pública Sarga.

El primero de ellos tuvo lugar el 17 de octubre y arrojó un resultado negativo y en los siguientes, realizados semanalmente, se contabilizaron 5.552 y en las dos semanas siguientes algo más de 4.000.

En esa fase de la migración, los estudios probaron que el grueso de la población de grullas que sigue la ruta migratoria occidental se encontraba todavía en el norte de Francia, donde se contabilizaron, en la primera semana de noviembre, hasta más de 260.000 en Lac du Der (Francia) debido a unas condiciones meteorológicas que impedían continuar la migración.

La presencia de las grullas puede responder al grado de inundación de la laguna. En 2018, las nevadas, las lluvias de primavera, las tormentas de verano y el efecto de la gota fría consiguieron recuperar la lámina de agua tanto del vaso lagunar como de los lagunazos circundantes, lo que propició que a principios de noviembre se censaran unas 30.000 aves y una invernada media alrededor de esta cifra.

En 2017 la laguna de Gallocanta permaneció seca durante todo el otoño-invierno lo que provocó una presencia excepcionalmente baja de grullas con conteos que oscilaron entre los 0 individuos del 10 de octubre de 2017 y los 9.345, como cota más alta, del 2 de noviembre de 2017.

Para acercar estas aves a la población y hacerlo de una forma ordenada y sostenible, el Departamento de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente de Gobierno de Aragón organiza durante los festivos y fines de semana de noviembre a diciembre paseos guiados gratuitos para todos los públicos por el entorno de la Reserva Natural de la Laguna de Gallocanta.

La observación se realiza desde alguno de los puntos existentes y el centro de interpretación proporciona catalejos telescópicos que permiten la visión desde largas distancias, ya que las grullas son unas aves muy esquivas, que toman el vuelo en cuanto detectan la presencia humana.

La actividad es gratuita pero es necesario realizar una reserva previa a través de la web www.rednaturaldearagon.com.