El presidente de Aragón, Javier Lambán, y el líder del PP, Luis María Beamonte, se han reprochado hoy en el pleno de las Cortes cruces de insultos y falta de respeto al parlamento, que el primero achaca a la "levedad" en la acción parlamentaria de los populares y el segundo, a déficit de gestión.

En la sesión de control al Gobierno, Beamonte ha preguntado a Lambán hasta cuándo piensa seguir instalado en un discurso, a su juicio, de falta de respeto institucional a la Cámara, que el presidente ha negado al recalcar que es "absolutamente respetuoso" con el parlamento.

Sin embargo, Beamonte ha insistido en que Lambán ya no busca concitar el mayor apoyo posible de la Cámara y en que se ha instalado en un discurso "monocorde" y en una "violencia verbal" hacia el PP, al dedicarles "joyas" como "disléxico político de libro" o "anomalía política", tanto a la expresidenta Luisa Fernanda Rudi como al líder de Podemos en Aragón, Pablo Echenique.

"Simples, indigentes políticos e inyectores políticos de veneno para dividir a la sociedad" son otros de los calificativos de Lambán hacia el PP que ha citado Beamonte, quien le ha preguntado si cree que eso es propio de un presidente de Aragón.

Para Beamente, insultar es fácil pero también tener cierto control sobre uno mismo y la "violencia verbal" de Lambán esconde su déficit de gestión buscando siempre otros culpables, desde la Iglesia a la Justicia o su "favorito", el gobierno anterior.

Y aunque ha señalado que no puede obligarle a dialogar y consensuar, sí le exige el mismo respeto que el PP tiene por el PSOE y que abandone el insulto y la descalificación personal.

Lambán ha replicado que el respeto institucional a las Cortes se demuestra compareciendo cuando se le requiere y respetando sus mandatos, y hasta ahora, ha dicho, él ha comparecido quince veces, siempre que se le ha solicitado, algo que no ocurría con Rudi, que a la misma altura de su mandado ya había faltado en ocho ocasiones a las peticiones de la oposición.

Además, ha asegurado que el Gobierno PSOE-CHA que preside trata de ser absolutamente respetuoso con los mandatos de las Cortes, mientras Rudi dijo entre otras "perlas" que los mandatos de la Cámara no son imperativos para el Gobierno y las iniciativas parlamentarias "se pueden cumplir o no".

"Ese es el respeto que tienen ustedes por las Cortes", ha remarcado Lambán, quien ha criticado que el PP se arrogue el "monopolio de decir lo que les dé la gana" amparándose en la libertad de expresión y cuando lo hacen otros lo tachan de insulto.

Así, ha recordado algunos de los calificativos que ha recibido de Beamonte, como irresponsable, sectario, radical, secuestrado o humillado, además de acusarle de mentir a los aragoneses y aferrarse al sillón, o de la portavoz del PP, Mar Vaquero, como esquizofrénico político, bipolar o incapaz.

"Como lo dicen ustedes, es un puro ejercicio de libertad de expresión", ha proseguido Lamnbán, quien ha apuntado que presentarle como un "faltón" ni siquiera es original, porque ya lo hacía Rudi, aunque ahora Beamonete recurre a ello para ocultar su "inconsistencia de argumentos".

Ha puesto como ejemplo de esa inconsistencia que Beamente negó en su comparecencia sobre el trasvase que hubiera riesgos y le acusó de crear alarma social cuando ayer votó "lo contrario" de lo que defendía porque pensó que lo que había hecho previamente "le podía quitar votos".

Lambán ha recogido el guante para extremar la "exquisitez en las formas" y de intentar el reto de acordar, pero ha emplazado al PP a ser recíproco, a no ser los "incitadores de la discordia" y a abandonar "esa especie de rencor que les invade y que les incapacita absolutamente para los pactos" para trabajar "no por sus intereses, sino por Aragón".