El presidente del Gobierno de Aragón, Javier Lambán, ha asegurado hoy que no está en su ADN romper acuerdos y que, por tanto, no va a invalidar el que ha firmado con el centroderecha (PP, PAR y Ciudadanos) para reformar el impuesto de Sucesiones como le pidieron el lunes pasado Podemos, CHA -su socio de Gobierno- e IU.

Tras participar en el acto de presentación del proyecto Mobility City, Lambán, en declaraciones a los medios, ha insistido en que no va a romper un acuerdo firmado con aquellas fuerzas "que han sido sensatas" y han estado de acuerdo con el Gobierno en eliminar la discriminación que a su juicio sufren los aragoneses con respecto al resto de españoles a la hora de tributar por las herencias.

Y es que, según Lambán, modificar el impuesto de Sucesiones es una cuestión de "igualdad territorial" y limitar el debate a hablar de posturas de izquierdas o de derechas es, a su juicio, "una tergiversación y una adulteración del debate político" que no está dispuesto a admitir, ha dicho.

Tras conocer el pacto al que llegó el PSOE con el centroderecha, desde Podemos y CHA se solicitó una reunión al Grupo Socialista para plantear una propuesta de modificación alternativa, que se va a celebrar finalmente, con la participación de IU también, mañana.

Pero ya ha avanzado que como presidente del Gobierno no puede aceptar que los aragoneses estén discriminados, y que actuó como debía hacerlo un jefe del Ejecutivo cuando llegó a acuerdos con PP, Ciudadanos y el PAR.

De los acuerdos a los que llegó con la izquierda para su investidura, ha insistido, tampoco ha roto "ninguno", sino que ha añadido otros.

A Lambán no le "duelen prendas" en llegar a acuerdos en beneficio de Aragón con cualquier fuerza política, que por otra parte es representante legítima de los intereses de los aragoneses, pero también ha reconocido que le gustaría que la reforma se apoyara por parte de todos los grupos.