El presidente de Aragón y reelegido secretario general del PSOE, Javier Lambán, se reunió ayer con el presidente de la Diputación de Huesca, Miguel Gracia, para «cerrar» el partido y comenzar a diseñar una dirección en la que las tres provincias estén proporcionalmente representadas. El objetivo de la cita fue «recomponer la unidad».

Durante el proceso de primarias, Gracia se alineó con la aspirante al liderazgo de los socialistas aragoneses, Carmen Dueso, quien perdió finalmente ante Lambán. De hecho, la relación entre el presidente de Aragón y Gracia se había deteriorado especialmente a raíz de dicho proceso interno.

Dueso ganó en la provincia oscense con un importante margen sobre Lambán, lo cual, a la postre, no fue suficiente por la distribución de votos en Zaragoza, claramente afín al actual secretario general del PSOE. De ahí la importancia de este primer encuentro entre ambos, fundamental para restañar las heridas orgánicas abiertas.

Durante esta reunión se trazaron las directrices para el diseño y funcionamiento de la Ejecutiva como del Comité Regional.