El presidente de Aragón, Javier Lambán, reiteró ayer que la legalidad del cobro del Impuesto de Contaminación de Aguas (ICA) en la ciudad de Zaragoza «está a prueba de bomba», como han refrendado, añadió Lambán, «todos los tribunales habidos y por haber».

Se trata de pronunciamientos que, recordó el presidente durante su visita al nuevo acelerador del Hospital Clínico de Zaragoza, descartan que los habitantes de la capital aragonesa paguen dos veces, sino que pagan un impuesto al ayuntamiento por depurar y otro al Gobierno de Aragón para contribuir a la depuración del resto de los municipios del territorio de la comunidad.

Por eso, aunque reconoce que el alcalde de Zaragoza, Pedro Santisteve, «puede hacer lo que crea conveniente», en alusión al anuncio que realizó el primer edil este lunes de recurrir el cobro del ICA ante los tribunales europeos, Lambán considera que «habría que echar la pelota al suelo» y estudiar cómo se destina parte de este impuesto a inversiones hidráulicas y de depuración que necesita la capital aragonesa.

En este sentido, apuntó que lo importante no es la fecha en la que se va a celebrar la reunión bilateral Ayuntamiento de Zaragoza-Gobierno de Aragón, sino que el listado de asuntos han sido «vistos, trabajados y pactados previamente» y uno de ellos es, precisamente, ver de qué manera el Ejecutivo autonómico destina parte de la recaudación del Impuesto de Contaminación de las Aguas a infraestructuras en la ciudad.

Cabe recordar sobre el recurso del ICA en Europa, que el primer edil anunció este lunes que el ayuntamiento de Zaragoza llevará muy probablemente a los tribunales de la UE.