Los centros de estética cuentan desde hace relativamente poco con una legislación propia. Sin embargo, no contempla específicamente las medidas de seguridad y precaución con la depilación láser, que no se trata como apartado específico. Así pues, tendrán que seguir siendo los tribunales quienes sienten jurisprudencia sobre las cautelas que los empleados deban adoptar con los clientes a la hora de someterles a este tratamiento estético.