Calatayud vivió ayer la ya tradicional procesión del Silencio recorriendo el casco antiguo, mientras se rezan cinco estaciones de penitencia con la Oración por la Paz y se cantan Jotas de Penitencia dedicadas especialmente al Cristo de la Paz. Una imagen que fue portada a hombros por la cuadrilla de costaleros de su hermandad y escoltado la Guardia Civil y el Escuadrón de Vigilancia Aérea número 1 del Ejercito del Aire.