Es uno de los problemas medioambientales más importantes de Europa y la lucha contra su reversión copa gran parte de las inversiones reales del Departamento del Desarrollo Rural y Sostenibilidad del Gobierno de Aragón. En el proyecto de presupuestos para este 2018 que se está debatiendo en el parlamento autonómico figura una consignación de 1,8 millones de euros más en acciones directas así como diversas partidas plurianuales en labores de investigación y desarrollo de laboratorios.

El borrador presupuestario reserva estas cantidades «con objeto de garantizar el control de la contaminación de los residuos de la fabricación de lindano en los emplazamientos de Inquinosa, Sardás y de Bailín», todos ellos en Sabiñánigo, y recuerdan que desde el 2004 se ha trabajado en labores de investigación y seguimiento hidrogeológico de la contaminación, unas acciones que pretenden seguir este año.

Gran parte de los fondos se dedican al bombeo de aguas contaminadas, su decantación y descontaminación mediante tratamiento en tres depuradoras de carbono activo. Este seguimiento está materializado en dos contratos plurianuales, uno para el emplazamiento de Sardas (886.286 euros en el 2018) y otro para el de Bailín (811.327 euros).

Agua, suelo y aire

Por otro lado, el departamento espera mantener las tareas de mantenimiento y explotación de las instalaciones y las dos depuradoras del vertedero de Bailín y la instalación de Sardas. A su vez, el laboratorio de de Bailín mantendrá su labor de análisis de aguas, suelos y aire de los emplazamientos afectados por los residuos.

Como se ha reconocido en multitud de ocasiones, la descontaminación de la zona excede la capacidad presupuestaria del Gobierno de Aragón. En este sentido, el propio borrador presupuestario recoge que en los últimos años se ha logrado un convenio con el Ministerio de Agricultura, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente firmado en el 2017, que garantiza una aportación estatal de 1,5 millones de euros, que tendrá un periodo de ejecución de tres años.

Nuevo laboratorio

También se va a proceder este año a redactar el proyecto de desmantelamiento de la antigua factoría y a la destrucción de los residuos de la fabricación del pesticida que se encapsularon en el recinto hace unos meses. Y para poder responder al aumento del volumen de analíticas generado y mejorar las condiciones de trabajo, se va a ejecutar un nuevo laboratorio de análisis en Pirenarium en Sabiñánigo. A esta instalación científica se dedican 588.623 euros.

Además de estas actuaciones, se va a proceder en el 2018 a la expropiación de los terrenos necesarios para la ejecución del desglosado del proyecto de remodelación de la balsa de lixiviados en el barranco de Sardas (111.000 €). Este es uno de los puntos en los que el lindano sigue enterrado bajo tierra y es necesaria una actuación completa para erradicarlo de la zona.